Carmen Avilés, sin medalla en el Europeo pero con la segunda mejor marca histórica

Un regusto agridulce, pero que debe servir como base para un futuro mucho más prospero e ilusionante. La atleta cordobesa, Carmen Avilés, fue la elegida para encabezar la escuadra femenina del relevo de 4x400 en el Campeonato Europeo 2024 de atletismo, celebrado en Roma. El objetivo en la semifinal estaba claro: acabar entre las tres primeras, o conseguir el récord de España para lograr estar en la final. Las españolas lograron la clasificación a través de esta segunda vía, con un espectacular tiempo de 3:25.25 que suponía la mejor marca histórica de la selección, y que les daban el pase a la gran final.

Ahí, frente a las atletas más imponentes del continente, la meta no era otra que disfrutar y tratar de mostrar la mejor versión. Carmen Avilés volvió a iniciar el relevo, pero no estuvo tan acertada como en la ronda previa, finalizando su turno con un tiempo de 52.85, en octava posición. Berta Segura sería la encargada de coger el testigo y, a rebufo de la alemana Schmidt, logró mantener el ritmo con la cabeza de carrera, marcando un segundo crono de 51.37, pero aún en octava y última posición. Eva Santidrián, sin embargo, sí que lograría remontar en su turno, y con un espectacular tiempo de 51.40 lograría acercarse aún más a las de delante, para que finalmente Blanca Hervás, con su 51.37, diese la séptima posición a las españolas.

Aunque la medalla finalmente no fuese posible, y el triunfo se fuese para Países bajos con un espectacular tiempo de 3:22.39, lo cierto es que el papel desempeñado por las españolas fue espectacular. El 3:26.94 supone la segunda mejor marca histórica de la selección, tan solo por detrás, precisamente, del 3:25.25 marcado en la semifinal por el equipo compuesto por Carmen Avilés, Berta Segura, Eva Santidrián y Blanca Hervás.

De esta manera, la aventura de Carmen Avilés en el Europeo de atletismo de Roma llega a su fin, con un final agridulce por haberse quedado a las puertas de una ilusionante medalla, pero con la sensación de orgullo de haber marcado los dos mejores tiempos de la historia del país. Así, la preparación para los Juegos Olímpicos de París sigue su curso, y la atleta cordobesa sigue acumulando sensaciones para una cita que será, sin duda, histórica.