El Ayuntamiento de Córdoba permitió al festival Córdoba Live saltarse la normativa de ruido

El Ayuntamiento de Córdoba autorizó en junio la celebración del festival Córdoba Live 2025 con una dispensa excepcional que permitió superar los límites acústicos establecidos por la Ordenanza Municipal de Protección del Medio Ambiente Urbano. No es una medida inusual para eventos puntuales, si bien, en este caso, fueron 14 días de conciertos que se celebraron en un entorno que, poco antes, ya había vivido nueve días de barra libre de ruido por la celebración de la Feria de Córdoba.

La información ha sido recabada por el portavoz municipal socialista, Antonio Hurtado, quien además ha señalado que el evento obtuvo la licencia sin que esta estuviera “condicionada al pago de las tasas por ocupación del espacio”, unos 17.000 metros cuadrados en el recinto ferial El Arenal. Sin embargo, este supuesto aún no ha sido aclarado por el Ayuntamiento de Córdoba. El concejal de Vía Pública, Jesús Coca, preguntado por este periódico, ha dicho que esa no es una cuestión de su competencia y ha añadido que, si se han pagado las tasas, se han abonado en Hacienda, evitando hacer más declaraciones al respecto.

Lo que sí deja claro la resolución emitida el 6 de junio de 2025 por la Gerencia Municipal de Urbanismo (GMU), es que el festival, que también ha recibido una subvención pública de 300.000 euros con cargo al Plan de Subvenciones del Instituto Municipal de Artes Escénicas (IMAE), quedó autorizado a incumplir temporalmente los niveles máximos de ruido durante el horario de los conciertos. La actividad, promovida por la entidad Gira Eléctrica AIE (un conglomerado que aglutina a tres de las más grandes promotoras del país), se celebró en el Recinto Ferial de Córdoba entre el 14 de junio y el 12 de julio, con un horario general de 22.00 a 03.00.

La programación contemplaba un total de 15 conciertos, si bien finalmente fueron 14, ya que el cabeza de cartel, el reguetonero Nicky Jam, suspendió su directo. Entre los artistas anunciados figuraban Juan Magan, Rels B, Maka, Los Pecos, Amaral y Manuel Carrasco. La actuación de Manuel Carrasco, celebrada el 12 de julio, contó con el aforo autorizado más elevado, con 12.745 asistentes.

La resolución, clasificada bajo el epígrafe de festivales y correspondiente a un establecimiento de carácter eventual, fue firmada por el gerente de la GMU y la decisión se adoptó conforme al artículo 44.1 de la ordenanza municipal sobre ruidos, tras valorarse el emplazamiento y las características específicas de la actividad. Sin embargo, dicho artículo, dice textualmente: “se requerirá inexcusablemente que a partir de las 0:00 horas la música ha de bajar hasta los límites establecidos en la Ley y a partir de las 2 horas cese obligatoriamente la emisión”.

El aforo máximo autorizado se fijó en 13.000 personas, si bien varió según la jornada. La autorización se concedió después de los informes favorables emitidos por la Oficina Técnica del Servicio de Licencias —con fecha 28 de mayo de 2025—, la Policía Local, el Departamento de Protección Civil y el Servicio de Extinción de Incendios y Salvamento.

Además de la dispensa acústica, la licencia incorporó numerosas condiciones y medidas correctoras centradas en la seguridad y la accesibilidad. Entre ellas figuraban la obligación de presentar con dos días hábiles de antelación el contrato de vigilancia específico de cada jornada, la ignifugación de carpas y elementos decorativos, la garantía de accesibilidad y personal de apoyo en zonas para personas con movilidad reducida y el mantenimiento libre de obstáculos de los viales destinados a la intervención de los bomberos.

La GMU advirtió de que la autorización quedaría sin efecto en caso de incumplimiento de las condiciones impuestas. Antes del inicio del festival, la organización presentó la documentación requerida, incluido el certificado de solidez de las estructuras, el certificado final de la instalación eléctrica y la acreditación del cumplimiento de todas las medidas exigidas, como los dispositivos sanitarios, la seguridad privada y la instalación de aseos accesibles.