Las Ciudades Patrimonio llaman a actuar con “urgencia” para hacer habitables los cascos históricos

El XVII Congreso Mundial de la Organización de Ciudades Patrimonio Mundial (OCPM) que se ha celebrado en Córdoba hasta este viernes en Córdoba ha concluido los foros de debate con la hoja de ruta que deberá marcar las estrategias de estas ciudades para los próximos años y en la que han querido destacar la “urgencia” para actuar sobre medidas que hagan habitables los cascos históricos. La masificación del turismo o el cambio climático son amenazas que se ciernen sobre estas ciudades y, en este congreso, los integrantes de la OCPM han querido plasmar en la Declaración de Córdoba el camino para que cada ciudad desarrolle acciones de regeneración urbana, movilidad, sostenibilidad y contra el calentamiento de las urbes.

El presidente de la Organización de Ciudades Patrimonio Mundial (OCPM), Bruno Marchand, que ha sido reelegido por dos años más, ha apostado por ese “sentido de urgencia” para “mejorar nuestras ciudades y tenemos que hacerlo rápido”. Se ha referido al compromiso de los representantes de las Ciudades Patrimonio para actuar “aunque sea difícil, para construir una ciudad pensando en los más jóvenes”, en referencia a las futuras generaciones.

Marchand ha apostado por que la hoja de ruta que sale de este congreso de la OCPM se exporte también más allá del grupo de Ciudades Patrimonio a organismos internacionales y países, porque según ha dicho “estamos marcando el camino, aunque tengamos culturas muy distintas”.

“Delimitar los alojamientos turísticos”

Sobre las conclusiones del congreso, el alcalde de Córdoba, José María Bellido, se ha referido a los ejes en los que se basan, con la regeneración urbana, la sostenibilidad, la movilidad y la lucha contra el cambio climático, para que los cascos históricos sean habitables. Y, en ese sentido, ha hablado de “hacer más viviendas y delimitar los alojamientos turísticos”, de manera que no se expulse a los vecinos pero siga llegando el turismo.

E igualmente ha apostado por “buscar espacios para crear más zonas verdes en los cascos históricos”, de loque ha puesto como ejemplo el espacio de la antigua biblioteca provincial que se unirá a Santos Mártires en una gran plaza con espacios verdes y de bienvenida a los visitantes. También ha hecho referencia a la importancia de los materiales que se usan en las ciudades, “para evitar el efecto isla de calor”.

Y ha coincidido con Marchand en que las ciudades deben volcar estas medidas en sus planes estratégicos para desarrollarlos “pensando en gobernar a largo plazo, aunque tenga un coste electoral. Somos ciudades únicas y es el bien común lo que está por encima”.

Por eso, Bellido ha señalado que ya hay medidas y acciones que se están tomando en otras ciudades, de las que apender y que sepueden replicar como ejemplos de buenas prácticas para conseguir la habitabilidad de los cascos históricos.