El PP critica el cambio de una calle en Carcabuey y dice que el Ayuntamiento tiene “el manual comunista ahí todo el día”

El Boletín Oficial de la Provincia (BOP) ha publicado este jueves el acuerdo al que llegó el Pleno del Ayuntamiento de Carcabuey, el pasado 3 de octubre, relativo al cambio de nombre una calle de la localidad con el objeto de cumplir con la Ley de Memoria Democrática. Aunque la propuesta salió adelante por una amplia mayoría -nueve votos a favor frente a los dos en contra del PP-, el debate plenario volvió a mostrar las desavenencias de los populares con esta norma estatal. Quienes lo deseen, tienen hasta el 12 de noviembre para examinar el expediente en el Consistorio y presentar alegaciones.

Uno de los puntos del día de aquel Pleno era el cambio de nombre de una de las calles del municipio: que Obispo Pérez Muñoz pasara a llamarse Las Parras, que, además era su denominación original. El cambio estaba avalado por informes de historiadores. La medida obtuvo la unanimidad de todos los grupos en el dictamen de la Comisión de Hacienda. Sin embargo, en el Pleno, el PP votó en contra alegando los “perjuicios administrativos” y defendiendo la “dimensión espiritual y social” del obispo.

Según la edil María del Castillo López Moya, el mantenimiento de la calle “no puede entenderse como exaltación del franquismo, sino como un recuerdo de su dimensión espiritual y social [del obispo]”, destacando “la labor pastoral, entre la que sobresale la creación de viviendas para familias humildes” en la ciudad de Córdoba. El PP sostuvo que este nombre se otorgó como “reconocimiento a su labor religiosa y social” y que el obispo “nunca ostentó cargos políticos ni administrativos dentro del régimen limitándose a la esfera eclesiástica”.

Según la oposición, en la aplicación del “principio de proporcionalidad, el cambio de denominación no resulta necesario para cumplir la finalidad de la ley porque la pervivencia de esta calle no supone exaltación ninguna ni lesión a la dignidad de las víctimas del franquismo”. Además, la concejala del PP aseguró que el cambio “genera perjuicios administrativos y económicos” a los residentes, quienes se ven obligados a modificar sus domicilios en registros. El grupo lamentó que no se hubieran previsto “medidas compensatorias” para estos residentes.

El PSO sí votó a favor

Por contra, el concejal del PSOE, Antonio Ismael Serrano Ayora, apoyó la moción afirmando que el cambio “es una deuda histórica por parte de los distintos ayuntamientos democráticos de nuestra localidad”.

En su intervención, el alcalde -Juan Miguel Sánchez Cabezuelo- defendió la obligatoriedad de la medida y que el obispo “colaboró y fue parte activa del régimen familiar”. Argumentó que la ley obliga a retirar de los rótulos a “toda persona que haya tenido vinculación con el golpe militar, el franquismo y dictadura”. Respecto al papel del obispo en el municipio, el regidor fue categórico asegurando que por Carcabuey “hizo nada, cero”, y recordó que en Córdoba, donde sí ejerció su labor, “le han quitado su nombre a la calle”.

El debate político escaló cuando el alcalde agradeció el apoyo a los socialistas, pero se dirigió al PP afirmando que, “de los herederos del franquismo no esperaba otra cosa”. El popular Francisco Jesús Rueda Caballero respondió inmediatamente asegurando que él no era “heredero del franquismo” -después el alcalde puntualizó que se refería al PP- y que a IU-CA solo le mueve “la política y la memoria histórica”. “Aquí tenemos banderas [en el salón de Plenos se exhibían en apoyo al pueblo palestino] y camiestas, pero los problemas de Carcabuey no los estáis arreglando. Sí digo que se podían recuperar los nombres antiguos de las calles, pero no por la memoria histórica, que estáis con el manual comunista ahí todo el día”.

Asistencia a los vecinos

En respuesta a las preocupaciones administrativas esgrimidas por el PP, el Ayuntamiento aseguró que ayudará a los vecinos con los trámites que necesiten. El alcalde detalló que, en relación con impuestos municipales como IBI, agua, alcantarillado, depuración e impuesto de vehículos de tracción mecánica, el Ayuntamiento “lo cambia de oficio”, por lo que “el vecino no tiene que hacer nada”.

En el resto de las gestiones (como Seguridad Social o Correos), la institución asistirá a los residentes a través del punto Guadalinfo y técnicos municipales. Además, se aclaró que el cambio del DNI “no es necesario cambiarlo, y, hacerse, es gratuito”.

Por último, el regidor llamó la atención porque los populares se opusieran al cambio basándose en los “perjuicios” para los vecinos, pero sí daban su beneplácito a otras variaciones si estas fueran tendentes a poner a las calles sus nombres tradicionales.