La gran obra para asegurar el agua potable a 200.000 cordobeses

Más de 200.000 cordobeses beben el agua embalsada en el pantano de Iznájar. Desde hace décadas funciona una estación de tratamiento de agua potable que a su vez bombea hasta los depósitos de Casilla del Monte, que son los que derivan el recurso a todos los pueblos al sur del Guadalquivir a través de una kilométrica red de tuberías. Pero la conexión entre Iznájar y Casilla del Monte tiene unas tuberías antiguas, que cada año sufren fugas y que generan miles de problemas. La empresa que gestiona el agua de la provincia, Emproacsa, admite el riesgo que supone. Y para evitarlo acaba de licitar una de sus grandes obras, valorada en nueve millones de euros.

La Plataforma de Contratación del Estado acaba de publicar la licitación de la obra de ejecución de nueva conducción de abastecimiento en el pantano de Iznájar y que llegará hasta la conexión con Casilla del Monte. Este es el primer tramo de los dos previstos, ya que el segundo tendrá lugar en Los Prietos. Dicha obra asegurará el agua potable a más de 200.000 cordobeses del sur de la provincia cordobesa en época estival.

Una obra que, según Emproacsa, es obligada, puesto que las tres tuberías han envejecido por el tiempo transcurrido y se encuentra en mal estado, siendo este el final de su vida útil. Los conductos presentan fugas en numerosas juntas y sufren averías que, con el paso de los años, cada vez es más complicado su reparación, gracias a que están hechos de un material en desuso: el amianto.

Y es que han pasado ya 30 años desde que se instalaron las tuberías de acero helicosoldado y eso ha hecho que presente ataques por corrosión al haber perdido el revestimiento interior. Es por ello que se han realizado reparaciones por pérdidas de material y, además, se ha encontrado un aumento de la rugosidad, lo que ha provocado que se haya visto disminuido de forma notable el caudal que puede transportar.

Las consecuencias de estos problemas: la falta de agua potable para 200.000 cordobeses

Asimismo, el crecimiento de la demanda y la disminución de la capacidad de transporte ha hecho que, a día de hoy, la infraestructura no sea capaz de suministrar los caudales necesarios y cada vez este déficit es mayor. Tanto es así que ya se ha comprobado que la demanda actual de agua ya supera el nivel considerado para 2005. Gracias a esto, se originan problemas de suministro en determinadas fechas del año, por lo que no se asegura el agua potable para 200.000 cordobeses del sur de Córdoba.

En un primer momento, las tres tuberías que actualmente se encuentran en funcionamiento estaban capacitadas para mover 800 litros por segundo y ahora se ha podido superar a duras penas los 700 litros por segundo. Una velocidad insuficiente para abastecer la demanda en época estival. Además, el material amianto puede llegar a ser cancerígeno.

Gracias a esto, el objeto de actuación es aumentar la capacidad de abastecimiento de agua potable en el tramo de Iznájar a Castilla del Monte. Una obra anunciada previamente por al Diputación de Córdoba, pero que ya se ha conseguido licitar. Se prevé la instalación de una nueva conducción que también permita no tener problemas en un futuro.

Por otro lado, y en el documento al que ha tenido acceso este periódico, el contrato tiene un valor de 9.803.173 euros (impuestos incluidos) y tiene previsto un plazo de ejecución de 18 meses. Además, el área de contratación del Estado ha apuntado que la fecha límite para presentar oferta será hasta el próximo 6 de mayo a las 18:00. A partir de aquí, comienza la apertura de documentación sobre la oferta económica mediante presentación telemática.