Urbanismo usará una pintura especial para devolver a La Corredera a su estado original

La Gerencia Municipal de Urbanismo (GMU) de Córdoba licitará en los próximos días, por unos 30.000 euros, los trabajos de restauración de emergencia en todos los arcos de la plaza de La Corredera, un espacio declarado Bien de Interés Cultural (BIC), y cuya reforma lleva postergándose desde finales del año 2021, cuando la Delegación de Infraestructuras retiró las lámparas diseñadas por Juan Cuenca y las sustituyó por focos de led.

Este miércoles, el presidente de la Gerencia, Salvador Fuentes, y los arquitectos Juan Murillo y Rosa Lara, han presentado los trabajos que se van a llevar a cabo en los pilares de estuco que forman los soportales de la plaza. Casi un año y medio ha pasado desde que Urbanismo hizo allí pruebas para ver el estado de los materiales de las columnas y los soportales, los daños en el estuco tanto en la zona del arco alto como el arco bajo.

Ahora, según ha adelantado Fuentes, se va a usar un tipo de pintura de silicato que puede mantener el aspecto y la forma estucada de los elementos arquitectónicos de forma mucho más económica, de manera que se va a poder atajar los actos vandálicos a medida que ocurren y se evitará tener que licitar un expediente cada vez que alguien lo hace. Y es algo muy común, como evidencia el hecho de que, sólo 24 horas después de hacer la primera prueba en una de las columnas, ésta fue grafiteada.

Este plan de emergencia se llevará a cabo en todos los muros y arcos de la plaza, y paralelamente, se impulsará una campaña de concienciación con vecinos, comerciantes y hosteleros de la zona para que estén alerta contra los infractores y, a los últimos, para que sean sensibles con el material que apoyan en las columnas (es común ver material anclado o mesas apoyadas) en los pilares.

También ha advertido de que se intensificarán los controles policiales. “La Corredera es una de las plazas más vandalizadas de toda España y vamos a ir contra el mal uso de esta plaza por algunos irresponsables”, ha dicho Fuentes, mientras Murillo recordaba que hacer un grafiti en un BIC es un presunto “un delito patrimonial”.

Las lámparas de Juan Cuenca

Respecto al plan de restauración integral de la plaza, los arquitectos han señalado que su retraso se ha debido al complejo proceso de adaptación de las luminarias de Juan Cuenca para que adopten un sistema más moderno, eficaz y sostenible“. En este ámbito, Rosa Lara ha detallado que aquellas lámparas fueron un diseño único del prestigioso arquitecto, pero muy complejo a la hora de adaptarlo a los lúmenes de una iluminación sostenible.

De hecho, las empresas sondeadas no ofrecía la sustitución de la iluminación a lo largo del tiempo, lo que va contra el protocolo de contratación de Urbanismo, lo cual ha complicado el proceso. Finalmente, se ha dado con la fórmula, y también con un taller que puede replicar las dos lámparas que se han roto y no pueden ser reutilizadas. En total, se devolverá a la plaza un total de 77 lámparas. De ellas, 65 estarán en los arcos de los soportales.