Adiós a Antonio Gala en la Fundación donde cada año brota la cultura de Córdoba

Pasadas las 10:15, el salón de actos de la Fundación Antonio Gala en Córdoba ha abierto sus puertas para albergar la capilla ardiente con el féretro con el cuerpo del dramaturgo, novelista, poeta y ensayista Antonio Gala, fallecido este domingo a los 92 años. La capital vive este lunes una jornada de luto oficial decretada por el Ayuntamiento de Córdoba en memoria del escritor, quien ha recibido los respetos de la ciudadanía cordobesa que aguardaba a las puertas de la Fundación.

Sobre el escenario, el féretro de Gala sobre el que descansaba uno de sus bastones. Ha sido su sobrino y director de la Fundación, José María Gala, quien lo ha colocado minutos antes de que se abriera la capilla ardiente. Imponente también el cuadro con un retrato del escritor que acompaña al féretro, asentado sobre una bandera de Andalucía. A su alrededor, coronas de flores enviadas en respeto de administraciones públicas como el Ayuntamiento de Córdoba, de Málaga y del Gobierno de España.

Poco a poco, quienes esperaban a las puertas de la Fundación han ido pasando por delante del féretro, donde minutos antes se encontraban el escultor José Manuel Belmonte y la que fuera directora del Museo Julio Romero de Torres, Mercedes Valverde. Muy pocos han sido los asistentes que han querido hablar con los medios de comunicación para trasladar algunas palabras en recuerdo de Gala. El silencio ha sido casi total, únicamente interrumpido tras la llegada de las autoridades al interior del salón de actos. En ese momento, el presidente del Parlamento de Andalucía, Jesús Aguirre, ha enarbolado un Padre Nuestro que ha sido seguido por algunos de los presentes bajo la atónita mirada de otros.

La capilla ardiente estará abierta hasta las 17:00, cuando comenzará un pequeño acto de despedida abierto al público y durante el cual, algún residente de la Fundación leerá un poema del escritor y se pronunciarán palabras en nombre de la familia y de la entidad. Tras esto, el cuerpo de Gala será trasladado al tanatorio para ser incinerado, tal y como era su deseo, ha comentado su sobrino. Sus cenizas se colocarán en la Fundación en un sitio reservado donde también se colocarán las cenizas de otra persona que el propio Gala guardaba en su casa.

Abrumado por la respuesta de la ciudadanía, José María Gala ha agradecido el cariño profesado tanto para él como para su tío y para la Fundación. “Esto es una medida objetiva del cariño que todo el mundo ha tenido hacia Antonio”, ha comentado su sobrino, quien ha recalcado que “aunque se ha ido el hombre, el escritor y su Fundación se quedan entre nosotros”. El presidente de la entidad ha anunciado, además, que “hay obra no editada que, posiblemente, vea la luz muy pronto”.

Sobre la Fundación, Gala ha asegurado que “va a seguir muy viva y acogerá a centenares de jóvenes creadores de todo el mundo que vendrán aquí para tener una oportunidad”. En lo que va de mañana han sido “varias decenas de escritores, artistas y músicos” los que se han acercado a la capilla ardiente tras haber pasado por la Fundación en los últimos 21 años. Además, “a mediados de junio, vamos a hacer las entrevistas personales para seleccionar al grupo de jóvenes creadores que será la promoción número 22 de esta Fundación”, ha comentado el director.

El alcalde en funciones, José María Bellido, se ha referido al legado que ha dejado Gala para la historia de la cultura y ha enfatizado en la importancia de su figura en la promoción de Córdoba. “Fue una persona que siempre presumió de su ciudad, de sus orígenes... Supo definir a Córdoba como lo que es: una gran ciudad en la historia de la humanidad y protagonista a la misma altura que otras ciudadanes como Atenas y Florencia. Nos deja su literatura y una Fundación en la que jóvenes talentos pueden iniciar su camino”.

Por su parte, el consejero de Justicia, Administración Local y Función Pública de la Junta de Andalucía, José Antonio Nieto, ha definido a Gala como “un referente cultural y humano” y ha destacado “todo lo que ha aportado a Córdoba y a España”. “Ha sido más que un magnífico dramaturgo, un grandísimo poeta o un novelista excepcional; ha sidio una persona que ha dado ejemplo” y ha sido al escritor a la altura de “Maimónides o Góngora”.

El presidente del Parlamento de Andalucía, Jesús Aguirre, ha lanzado un grito porque “Antonio vive con nosotros, independientemente de que su cuerpo haya pasado a otro estado. Él vivirá de forma continua en los cordobeses mientres estemos leyendo un libro suyo o pensando en él”.

De Gala, el consejero de Universidades -José Carlos Gómez Villamandos- ha alabado su “generosidad hacia los jóvenes y para generar esa cultura que permitiera a los demás crecer”. Esto es digno de elogio, “pero también, desde luego, su obra, que nos acompañará siempre”.

Después de mostrar sus respetos al escritor, las autoridades han firmado en el libro de condolencias dispuesto por la Fundación, que también ha habilitado un libro online para que todo el que lo desee pueda dejar sus últimas palabras a Gala. El ministro de Cultura y Deporte, Miquel Iceta, asistirá esta tarde a la capilla ardiente.

Así fue la obra de Antonio Gala

Con su primera novela, 'El manuscrito carmesí' (1990), Gala ganó el Premio Planeta. A ésta le siguieron 'La pasión turca' (1994), 'Más allá del jardín' (1995), 'La regla de tres' (1996), 'Las afueras de Dios' (1999), 'El imposible Olvido' (2001) y 'Los invitados al jardín' (2002).

Posteriormente, publicó 'El dueño de la herida' (2003) y 'El pedestal de las estatuas' (2007). 'Granada de los Nazaríes' o 'Andaluz', ambos de 1994 y la publicación de recopilaciones como 'Córdoba de Gala' (1993) son fruto de su interés por la cultura andalusí, de la que se sentía partícipe.

En su obra poética se encuentran libros publicados a una edad temprana, 'Enemigo íntimo', y otros mucho más cercanos en el tiempo: 'Poemas cordobeses' (1994), 'El águila bicéfala: Textos de amor' (1994), 'Poemas de amor' (1997) y 'El poema de Tobías desangelado' (2005).

Además del Premio Adonais, del Planeta y del Calderón de la Barca ha recibido, entre otros, los siguientes galardones: Premio Ciudad de Barcelona 1965; Premio Foro Teatral 1971; Premio Nacional de Literatura, Premio del Espectador y Premio de la Crítica de 1972; Premio Quijote de Oro 1972-73; Premio Antena de Oro y Premio Mayte de 1973; Premio Nacional de Guiones 1973 y Premio Medios Audiovisuales 1976.