Aremehisa señala, en el 143 aniversario de Renée Lafont, que no dejará de buscar la verdad

La asociación memorialista cordobesa Aremehisa ha destacado, cuando se cumple esta miércoles 4 de noviembre el 143 aniversario del nacimiento de la periodista francesa Renée Lafont y que fue fusilada en Córdoba por los franquistas en 1936, que no parará en la búsqueda de “la verdad” sobre su asesinato, mediante una investigación que inició hace ya cuatro años y que, “más pronto que tarde, dará sus frutos”.

A este respecto y en un comunicado remitido a Europa Press, Aremehisa ha recordado que Lafont, que nació en la localidad francesa de Amiens en 1877, fue “detenida y fusilada en Córdoba, a más de 1.800 kilómetros” de su ciudad natal, “el día 1 de septiembre de 1936, cuando le faltaban 59 días para cumplir los 59 años de edad”.

Desde entonces, según ha recordado la asociación memorialista, “ya se han cumplido 84 años de su asesinato y desaparición” y, por eso, este miércoles 4 de noviembre, “junto al 143 aniversario de su nacimiento, también hay que destacar una fatídica y vergonzosa cifra, la de que Renée Lafont llevará 30.725 días desaparecida”.

Fue el pasado 13 de febrero de 2019, “entre las 12,00 y las 13,30 horas”, cundo los restos de una mujer, “la primera en ser exhumada en Córdoba en el Cementerio de la Salud de la sepultura número seis”, fueron extraídos “de la tierra que la aprisionó durante tantos años”, resultando que ese cuerpo “presuntamente podria ser el de Renée Lafont”, extremo éste que aún se investiga.

Aremehisa ha señalado que “631 días han transcurrido desde entonces”, es decir, “casi dos años ya” en los que la asociación memorialista no ha parado “ni un solo día en la búsqueda de la verdad”, tanto en Francia, como en España, en el marco de “un trabajo que, más pronto que tarde, dará sus frutos, después de más de cuatro años de investigación y búsqueda”.

Entre tanto, este miércoles 4 de noviembre de 2020 se cumplirán los mencionados 143 años del nacimiento de la periodista francesa y, según ha insistido Aremehisa, ya se ha llegado, en el marco de la referida investigación, al “último eslabón de esta enorme y larga cadena”.