“Las listas de espera nos condenan a muerte”: la provincia clama por la sanidad pública en Córdoba

Llevaban tres semanas de encierros, cortes de carreteras y concentraciones en los pueblos del Sur de Córdoba y este viernes, alcaldes, alcaldesas y la Coordinadora de plataformas por la Sanidad Pública de esta zona de la provincia ha culminado sus protestas en la capital. Lo han hecho con un encierro en la Diputación Provincial y una concentración a sus puertas donde se han escuchado sus gritos por una sanidad pública de calidad, con reivindicaciones para que el Servicio Andaluz de Salud reduzca listas de esperas, aumente la plantilla de profesionales sanitarios y mejore las infraestructuras de atención al paciente.

“Gobierne quien gobierne, la sanidad pública se defiende”, “Las listas de espera, a muerte nos condenan”, “Es criminal recortar en sanidad”, “Nuestros sanitarios sí son necesarios; nuestros hospitales, no se desmantelan” o “Los pueblos, unidos, jamás serán vencidos”, han sido algunos de los cánticos lanzados a media tarde en la puerta de la Diputación, en una concentración con las pancartas de las plataformas en defensa de la sanidad pública del Sur de Córdoba. También se han escuchado mensajes pidiendo la dimisión de la delegada de Salud en Córdoba, María Jesús Botella.

Una docena de alcaldes y alcaldesas

Como rostros conocidos de cada municipio, al frente han estado los alcaldes y alcaldesas de una docena de pueblos, como han sido los de Baena, Carcabuey, Almedinilla, Fernán Núñez, Montilla, Fuente Palmera, Doña Mencía, Iznájar, Nueva Carteya, Aguilar de la Frontera, Zuheros y Fuente Tójar, todos de IU y PSOE. Desde las 15:00 han protagonizado un encierrro simbólico en el Salón de Plenos de la Diputación y a ellos se han ido sumando representantes de la Coordinadora, con integrantes del lado tanto de los vecinos y pacientes como de los profesionales sanitarios.

Las carencias de personal, de infraestructuras en algunos casos y las listas de espera que demoran la atención a los pacientes forman parte de la cuadratura perfecta de esa sanidad pública deficiente que los participantes en la protesta han venido a denunciar. Reivindicaciones como la dotación de médicos de urgencias en toda el área Sur, la creación de un área sanitaria propia de la Campiña Sur, la dotación de personal en los hospitales de Cabra, Montilla y Puente Genil para cubrir todas las especialidades médicas, el aumento de las ambulancias o inversión para ampliar y modernizar los centros de salud de los pueblos, han sido algunas de esas reivindicaciones que la Coordinadora ha venido recogiendo en cada municipio.

Con todo, los participantes han recogido sus propuestas y su denuncia en un manifiesto, que se ha leído a la puerta de la Diputación, donde en representación de los alcaldes y alcaldesas, los primeros ediles de Fernán Núñez y de Fuente Tójar, han tomado la palabra para contar una vez más la situación de la sanidad en sus pueblos, pedir que no se desvíe dinero a la sanidad privada y que se invierta en la pública. Además, personal sanitario como un representante del sindicato Satse también ha tomado la palabra para dejar constancia de que, en las reivindicaciones por las carencias del sistema sanitario, “pacientes y profesionales deben ir de la mano”.

Lectura de un manifiesto

El manifiesto que se ha leído en nombre de los alcaldes que han protagonizado este encierro en la Diputación y de la Coordinadora en Defensa de la Sanidad Pública del Sur de Córdoba ha sido el siguiente:

“Durante estas tres últimas semanas, las Plataformas que formamos parte de la Coordinadora en Defensa de la Sanidad Pública del Área Sur de Córdoba y algún pueblo más de la provincia, hemos llevado a cabo encierros y concentraciones en cada una de nuestras localidades, con la intención de dar visibilidad al deterioro en la salud que estamos soportando, debido al desmantelamiento de la sanidad pública en Andalucía.

Hoy damos por finalizados los encierros con el de Cañete de las Torres, y con el de nuestros y nuestras Alcaldesas en la Diputación de Córdoba, nuestra casa común representativa, y que como institución debería estar defendiendo a los y las ciudadanas ante la Delegada de Sanidad María Jesús Botella, como responsable de las carencias de personal en Centros de salud, Consultorios, Hospitales, falta de ambulancias, tardanza en la reparación y /o sustitución de equipamientos, descontrol e incumplimientos de las compañías de ambulancias y lavandería, Consultorios inadecuados para la atención sanitaria, masificados, y edificios en estado lamentable, no se cubren bajas, vacaciones y/o jubilaciones, derivaciones multitudinarias a centros privados para pruebas e intervenciones que se realizaban en los hospitales de la zona y que obligan a desplazamientos innecesarios con el consiguiente coste económico, insoportable para algunas familias, mientras nuestros centros se encuentran cada vez más infrautilizados, duplicando los costes de manera sospechosamente no legal.

Mención aparte merece, por el incumplimiento cínico de esta Delegada, el haber firmado junto a los agentes sociales, y el viceconsejero, la división del área sanitaria, en periodo electoral, y pasado éste, con argumentos espurios, pueriles e infantiles, retractarse del acuerdo, apoyada por la consejería. Seguimos y seguiremos exigiendo la división del área.

El resultado de la mala gestión por incapacidad, o por la implantación de políticas cuyo fin es deteriorar la sanidad pública para favorecer a la privada, está más que a la vista y es una realidad que es imposible de ocultar, falta de pediatras de manera generalizada, citas de atención primaria de más de trece días, que la condena a la inutilidad, hospitales fuera de la capital, con falta de recursos materiales, de especialistas y personal sanitario, pacientes que se pierden a la espera de la ambulancia que nunca llega, como hemos oído en la cadena Ser, la permisividad para que se pueda trabajar sin límite ni medida en la pública y la privada, con un aumento desatado de listas de espera en pruebas e intervenciones, con datos de la Consejería a sabiendas de que están trucadas.

Punto y aparte merecen las listas de espera de revisiones, que no forman parte del Decreto de plazos, donde los atrasos se contabilizan por años.

Todo esto está llevando al deterioro de la salud de los y las habitantes de nuestros pueblos, y junto al desmantelamiento de la educación y la dependencia, al no ser atractiva para una juventud que como viene siendo habitual en las últimas décadas, tienen como salida la emigración a otras tierras, de esta manera nuestros pueblos envejecen y van muriendo poco a poco.

Por todo ello, nuestras movilizaciones no van a parar, y junto con nuestros Alcaldes vamos a dar la batalla por nuestra supervivencia, por cada uno de nuestros vecinos y vecinas, por nuestros niños y nuestros mayores, y no vamos a desfallecer porque nos va la vida en ello. Gobierne quien gobierne, la sanidad pública y nuestros pueblos se defienden. esta batalla la vamos a ganar“.