“A ver hasta dónde somos capaces de aguantar la presión”

Rafa Moreno, entrenador del Adesal, dice que la permanencia en la DHF “se decidirá en Las Palmas” en la última jornada de liga

No va más. El Adesal Córdoba se ha conjurado para buscar la permanencia en un escenario al límite. Necesita ganar el próximo sábado en la cancha del Rocasa canario y esperar a que el Castelldefels, su directo rival, no lo haga en el pabellón del Guardés. Quedan 48 horas para que el equipo de La Fuensanta dispute su último partido en la DHF... por esta temporada. Con esa ilusión se están preparando las chicas de Rafa Moreno, un técnico que tendrá que exprimir toda su experiencia en los banquillos para salir airoso de una situación de extrema complejidad. “Nos jugamos la permanencia o el descenso. Y digo que nos lo jugamos porque creo que va a depender de lo que hagamos en Las Palmas. El Castelldefels tiene también sus opciones de ganarle al Guardés, pero la clave va a estar en Las Palmas. El Adesal debe hacer un partido completo, morder y complicar al Rocasa, porque es su final. Soy optimista y creo que es importante la predisposición que tengamos de salida y ésta depende de la ilusión que le pongamos, que va a ser toda porque queremos llegar hasta el final”, analiza el entrenador cordobés.

Después de sufrir dos derrotas en los dos últimos partidos, el Adesal está en una situación sin margen de error. Moreno estima que las razones de esos reveses en este final liguero son claras. “Tan sencillo como el nerviosismo de rematar situaciones. En el último partido, recuperamos seis goles de diferencia ante un equipo muy superior como el Guardés. Y hasta tuvimos dos o tres balones para ponernos por delante, pero no lo hicimos y eso fue producto de los nervios. También lo de los penaltis, porque en dos finales no puedes fallar hasta 10 penaltis. Hicimos lo que teníamos que hacer y dando la medida de lo nuestros. Nos faltó algo de tranquilidad”, apunta el técnico, quien alberga esperanzas de que el partido ante las canarias sea parecido -aunque con resultado positivo- al que ambos dirimieron en la primera vuelta. “Ojalá se pareciera. Allí teníamos menos presión que ellas. Ahora el partido mentalmente es muy distinto. Lo cierto es que les disputamos el partido y hasta hubo fases en las que fuimos capaces de llevar la iniciativa. De no ser por la falta de experiencia en los instantes finales, podíamos haber sacado algo. Vamos a ver si juegan como los que no se juegan nada y están más relajadas, mientras que nosotras debemos afrontarlo como una final desde el minuto uno y sin que se nos escapen. Llegando al final así, vamos a ver hasta dónde somos capaces de aguantar esa presión”.

La empresa es de titanes porque el Rocasa no ha perdido ningún partido en casa en lo que va de temporada. “Es un equipo que ha estado disputando la Liga hasta este fin de semana. Pero no vamos a mirar eso. Vamos a mirar nuestros números y cifras. Cuando acabas tu competición es otra historia, pero el Rocasa tiene jugar con la deportividad e intensidad propias. Pero no será el mismo equipo que se está jugando un objetivo”, manifiesta Moreno, quien admite que el nivel físico de su equipo está “ajustadito, como todos los equipos de la Liga. Justito en fuerzas y número. Esperamos contar con todas y hasta el último minuto”. Todo el dolor quedará aparcado durante 60 minutos en Las Palmas. Ahí se jugará el Adesal el todo por el todo. “Hemos triunfado en cuanto al deseo de la gente de que el balonmano siga. Gracias a todos. Sé que las niñas no les van a defraudar en ese esfuerzo”, sentencia el experimentado entrenador.