Noia Portus Apostoli - Córdoba Futsal

— Crónica

El Córdoba Patrimonio suda para sacar un punto ante el Noia Portus Apostoli

La necesidad de encontrar la regularidad en una división tan competida como es la máxima categoría del fútbol sala a nivel nacional. Lo que siempre le ha costado objetivos más ambiciosos al Córdoba Patrimonio de la Humanidad en la élite de este deporte es el vaivén de sensaciones cosechadas en un tramo de competición en concreto, por lo que puntuar en situaciones límite es una asignatura pendiente. De hecho, los blanquiverdes llegaron a estar por detrás casi la totalidad de la segunda parte ante un Noia Portus Apostoli que no consiguió la segunda victoria de la temporada merced a errores propios en defensa.

Un encuentro en el que la oportunidad para el Córdoba Patrimonio de la Humanidad no podía generarle ansiedad o nerviosismo, sobre todo por lo pasado en Zaragoza no hace muchos días. Es por ello que la escuadra dirigida por Emanuel Santoro salió a la pista del Pabellón Municipal Agustín Mourís con un punto más de intensidad, lo que provocó que, en la primera acción de juego, Macedo ya tuviese la primera ocasión del duelo gracias a un pase por alto de Fabio, pero su cabezazo se marchó por encima de la mesa de Schutt. Por su parte, el Noia Portus Apostoli llegaba a este choque con urgencias, cerrando la tabla clasificatoria de la Primera División y con la necesidad de contentar a su afición, por lo que también tenía que empezar, por lo menos, compitiendo el esférico e intentando aprovechar sus acercamientos. De hecho, Pirata avisó a los blanquiverdes a balón parado con un disparo que rechazó la madera del arco califal.

Sin embargo, la oleada ofensiva del conjunto gallego fue más un espejismo que un asedio constante. La escuadra califal, en vez de dar un paso atrás después del aviso de Pirata, lo que hizo es asentarse en la pista visitante, desactivando a un Noia Portus Apostoli que no era capaz de apretar a su rival. Tanto fue así que el Córdoba Patrimonio de la Humanidad tuvo una serie de acercamientos que inquietó, y mucho, la meta de un Schutt que tuvo que emplearse a fondo para evitar el primer tanto blanquiverde gracias a los disparos de Arnaldo Báez y Felipe Echavarría por partida doble. Gracias a la actuación del portero local, el marcador seguía sin moverse, aunque sí que había acciones que invitaba a ello.

Y es que el conjunto comandado por David Palmas despertó en el tramo final de la primera mitad, sin un excesivo dominio de balón, pero sí que con la contundencia en las áreas que tanto le había faltado en los primeros 15 minutos del duelo. Por ello, el Córdoba Patrimonio de la Humanidad se quedó sin argumentos y pedía como fuera que el descanso llegase lo antes posible. Aun así, el Noia Portus Apostoli apretó a unos blanquiverdes que se encomendaron en un Fabio que sacó de manera milagrosa una doble oportunidad protagonizada por David Pazos y Pirata para mandar tanto a los suyos como a los gallegos al paso por vestuarios con el empate en el luminoso.

En la reanudación, el partido parecía volver a sus inicios, con un Noia Portus Apostoli muy impreciso, nervioso quizá sobre todo porque solo le valía la victoria para tratar de acercarse a la permanencia o incluso salir de la zona de descenso a Segunda División. Debido a esto, el Córdoba Patrimonio de la Humanidad sabía que podía aprovechar esta falta de confianza por parte local y a punto estuvo de adelantarse en el marcador hasta en dos ocasiones. Por un lado, Tiago Macedo dribló a su par tras un aclarado blanquiverde y su disparo se marchó rozando la portería gallega, mientras que, por el otro, Kaué se giró a la perfección y ejecutó un chut que repelió la madera.

A pesar de esta oleada ofensiva por parte visitante, siempre se ha dicho que en el balompié, ya sea sobre el parqué o césped natural, quien perdona, lo acaba pagando y esta vez no iba a ser una excepción. En una falta aparentemente sin peligro, David Pazos dejó en la frontal del área para que Álex García fusilase a Fabio después de que la defensa blanquiverde no saliese a tapar el disparo, subiendo el primer tanto del duelo para un Noia Portus Apostoli que ahora tenía que defenderse con todas sus armas si quería conseguir una victoria importantísima en el Pabellón Municipal Agustín Mourís.

Ahora bien, este tanto no alteró los planes de un Córdoba Patrimonio de la Humanidad que es cierto que empezó a jugar con más prisa, no con la excesiva calma que había demostrado en los primeros instantes de la segunda mitad. Esto hizo que esa chispa que le faltaba en los metros finales fuese protagonista, provocando que las acciones peligrosas cayesen por su propio peso. Y es que Arnaldo Báez realizó un disparo tras un buen pase de tacón de Felipe Echavarría que obligó a Schutt a emplearse a fondo y, nuevamente y minutos más tarde, Kaué estrelló otro balón al larguero. Cuando todo parecía que la victoria local iba a irse a los últimos instantes, un error de la defensa gallega dejó el balón franco para el pívot brasileño que dejó para que Echavarría de tacón devolviese el empate al marcador.

El partido cambió totalmente después del tanto blanquiverde. Los chicos dirigidos por Emanuel Santoro tenían que decidir si querían ir a por el partido, traerse para la capital cordobesa el mayor botín posible y así fue. Dieron un paso al frente que no generó excesivo peligro en un Noia Portus Apostoli que tuvo una ocasión más que clara en las botas de un Matheus Preá que, cuando ya todo el pabellón gallego cantaba el gol, no acertó a rematar con fuerza, haciendo que Víctor parase en plena línea de gol. Con el susto en el cuerpo, el Córdoba Patrimonio de la Humanidad firmó un empate de mérito en la pista del colista, y consigue puntuar por segundo encuentro consecutivo.