Disfruten, rían y sobre todo sueñen: el ascenso es posible
El equipo de Ferrer se impone en La Condomina (1-2) y peleará con la UD Las Palmas por un puesto en la élite
En la vida cada instante digno de ser recordado, memorable, debe ser disfrutado al máximo. El cordobesismo lo hizo esta noche en territorio ajeno. Esa circunstancia no asustaba, su equipo se mostró siempre mucho más fuerte lejos de casa en el tramo final del campeonato. Si se goza, está claro que las risas han de llegar. Y aparecen a puñados inmensos en una grada muy alta del Gol Norte de la Nueva Condomina. Los aficionados del Córdoba disfrutaron y rieron. Lo hicieron, hacen y harán porque el conjunto blanquiverde venció al Real Murcia y superó el primero de los dos últimos escollos que tenía para lograr el salto de categoría. Un gol de Pedro sirvió para tomar ventaja en el primer acto y otro de Raúl Bravo para restar valor a otro, hermoso, de Wellington Silva. La felicidad permite los sueños y estos florecen como lo hace la ciudad de los califas cada mayo.
El cuadro califal se mantiene en la lucha por el ascenso. Sólo un cambio realizó Albert Ferrer en el once respecto del que presentó en el duelo de ida. Éste fue el obligado en la media punta, en que Uli Dávila ocupó el lugar que dejó el lesionado Pelayo. Por su parte, López Silva no pudo llegar al partido y fue el descarte del preparador catalán, por lo que regresaron a la lista Raúl Bravo y Mendi. En cuanto a Julio Velázquez, introdujo en la zaga a Dani Bautista por Truyols. Las espadas estaban en todo lo alto y eso se notó en el terreno de juego, en que los dos equipos se mostraron ambiciosos desde el inicio. Así, apenas unos instantes después de que arrancara el balón, una recuperación del Córdoba permitió que Juanlu recibiera en gran situación en el interior del área local. El providencial corte de un zaguero evitó que hubiera remate. El Murcia contestó acto seguido con dos buenas internadas por el flanco izquierdo que por fortuna acabaron en nada. El partido estaba bonito y más se puso a partir del minuto 5. Una indecisión en defensa de los blanquiverdes finalizó con la caída de Eddy en el interior del área cuando Juanlu le arrebataba el esférico. Si bien parecía claro que no existía nada, Jaime Latre, tras unos segundos, señaló el punto de penalti. Las cosas se complicaban para los de Albert Ferrer, que miraban a Saúl con el deseo de que fallara tan magnífica ocasión de tomar ventaja en el tanteador. Quizá funcionó, porque el atacante grana disparó fuera. Y cómo será el fútbol, con sus cosas, que en el minuto 7 la escuadra califal golpeó con contundencia. Un centro de Juanlu llegó al segundo palo, donde se encontraba Pedro. El de Aspe, ex murcianista, cabeceó de manera incontestable para hacer el 0-1 y cambiar la película en algo menos de 120 segundos.
La Nueva Condomina enmudeció y entonces se escuchó con aún mejor al millar de seguidores blanquiverdes desplazados. A los aficionados les costó volver a arrancar. De hecho, lo hicieron en momentos concretos. Todo se ponía de cara para el Córdoba, aunque tocaba resistir mucho más de una hora. Quedaba una eternidad, pero el infalible visitante comenzó poco a poco a llevar el encuentro a su terreno. Cada oportunidad para detener el choque era bien aprovechada, se tapaban bien los pocos espacios que atrás pudiera haber y se controló el cuero. Ni siquiera Wellington Silva y Saúl eran capaces de generar sensación real de peligro sobre la meta de Juan Carlos. Los puñales estaban poco afilados. Los albiverdes, mientras, manejaron la situación con inteligencia y provocaron que el resto del primer acto transcurriera sin más lanzamientos a puerta. Sólo una mala acción de Abel Gómez en un saque de falta creó incertidumbre. Aunque no pasó a mayores. Al regreso de los vestuarios, los dos técnicos dejaron a las claras sus intenciones para el segundo tiempo con las primeras sustituciones. Al tiempo que Julio Velázquez hizo un cambio netamente ofensivo con la entrada de Malonga por Dani Bautista, Ferrer dio inclusión a Raúl Bravo por Juanlu.
El de Gandía ejerció de carrilero. Los primeros minutos se desarrollaron sin que el Córdoba pasara apuros, a pesar de que el Murcia intentaba imprimir velocidad a su juego y ganar las espaldas de la zaga visitante. Pero en el minuto 52 -otra vez a los siete de la parte en disputa- los granas asestaron un duro golpe. Desde la frontal, Wellington Silva no se lo pensó dos veces y se sacó un disparo al palo contrario que resultó imparable. Un gol de bella factura que dio vida al duelo. El tanto generó dudas en los blanquiverdes ante la avalancha local. Entonces, el preparador califal decidió reforzar el centro del campo con López Garai, que suplió a Arturo. El cronómetro apenas había avanzado para que esta permuta surtiera efecto cuando Raúl Bravo llevó nuevamente a la locura a la grada visitante. Pedro recibió en banda derecha y de cabeza cedió a Gunino, que colocó un centro perfecto al segundo palo. Allí remató con la testa el ex del Real Madrid para establecer el 1-2. El conjunto pimentonero debía ante situación poner toda la carne en el asador, y así fue. Su entrenador dio entrada a Iván Moreno por Dorca. Por mucho que el Córdoba contara con ventaja en el marcador y en la eliminatoria la calma era difícil de mantener. No en vano, los murcianos empezaron poco a poco a apretar y vivir de manera casi constante en las cercanías del área blanquiverde. En el 69, Saúl buscó el empate con un lanzamiento de falta que se perdió por línea de fondo tras tocar en la barrera.
En el correspondiente córner, Iván Moreno envió el cuero por encima de la meta defendida por Juan Carlos. Quizá los nervios pasaron factura al cuadro local en las últimas decisiones, pues todos sus tiros eran imprecisos. No ocurrió así en el 74, cuando una recuperación pimentonera en la medular propició una clara ocasión de Eddy, que salvó con una gran estirada Juan Carlos. Después de la leve tempestad, apenas perceptible, el encuentro pasó a una fase en que al Murcia le costaba mucho más enlazar acciones ofensivas y más buscar el disparo. Tenía que quemar todos sus cartuchos el entrenador grana y no dudó: Tete, hombre de ataque, sustituyó a Álex Martínez, lateral. La escuadra califal se manejaba bien y no sufría, aunque todavía se daba alguna que otra acción peligrosa. Una colada de Wellington Silva, por ejemplo, terminó con un pase al interior del área que Malonga no pudo rematar bien por la oposición de un zaguero visitante. El mismo jugador mandó el balón al larguero en un disparo ya en el tiempo de añadido. Al final, triunfo y a pensar en la eliminatoria decisiva. Disfruten, rían y, sobre todo, sueñen: el ascenso es posible.
FICHA TÉCNICA
MURCIA, 1: Casto, Molinero, Dos Santos, Dani Bautista (Malonga, 46'), Álex Martínez (Tete, 76'), Toribio, Dorca (Iván Moreno, 65'), Wellington Silva, Eddy, Saúl Berjón y Kike García.
CÓRDOBA, 2: Juan Carlos, Gunino, Iago Bouzón, Fran Cruz, Pinillos, Luso, Abel (Campabadal, 86'), Pedro, Juanlu (Raúl Bravo, 46'), Uli Dávila y Arturo (López Garai, 56').
ÁRBITRO: Jaime Latre (Comité Aragonés). Amonestó con tarjeta amarilla a los locales Dorca y Dani Bautista y a los cordobesistas Juanlu, López Garai, Iago Bouzón y Raúl Bravo.
GOLES: 0-1 (8') Pedro. 1-1 (52') Wellington Silva. 1-2 (57') Raúl Bravo.
INCIDENCIAS: Partido de vuelta de la primera eliminatoria por el ascenso a Primera División, disputado en la Nueva Condomina ante 16.794 espectadores, con un millar de cordobesistas entre ellos.
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