El arquitecto Norman Foster visita el Palacio de Viana de Córdoba y lo cataloga de “experiencia innovadora”

El prestigioso arquitecto británico Norman Foster se encuentra de visita por Córdoba y tras conocer el buque insignia de la capital, la Mezquita-Catedral, ha decidido adentrarse en la belleza monumental y floral que rezuma el Palacio de Viana, al que ha catalogado de “experiencia innovadora”.

Pluriempleado para poder estudiar, con 21 años inició su carrera de Arquitectura. La obra que le hizo popular fue el Banco de Hong-Kong y Shanghai, en 1985, un rascacielos de cristal de 47 plantas que destaca por la funcionalidad de los espacios, la iluminación natural y el uso de la tecnología como herramienta de creación arquitectónica. En 1988 le fueron asignados en España los proyectos de construcción de la línea de metro de Bilbao (inaugurado en 1995) y de la torre de comunicaciones de Collserola en Barcelona (en el Tibidabo), que fue vital para los Juegos Olímpicos de 1992.

Entre sus obras más representativas destacan la terminal aérea del tercer aeropuerto londinense (Stansted, Essex), la cúpula de vidrio del edificio restaurado del Reichstag alemán, la nueva sede del Commerzbank de Frankfurt (Alemania) de 62 pisos, la cúpula del patio central del Museo Británico (Londres), la torre de Swiss Re en Londres, el centro musical Sage Gateshead (Reino Unido), el puente del Milenio londinense y el Carré d´Art (Nimes). Norman Foster es el autor del puente más alto del mundo, que se eleva a 243 metros sobre el río Tarn (Francia) y sobrepasa en 23 metros la altura de la Torre Eiffel. Inaugurado en diciembre de 2004, está considerado el primer gran proyecto del siglo XXI.

Además de su visita a la Mezquita-Catedral y al Palacio de Viana, Foster ha acudido a Bodegas Campos. Según afirman desde la entidad cordobesa, el arquitecto habría asegurado que el todo el entorno de Bodegas Campos es un “lugar increíble”.

Foster posee el título nobiliario de Lord Foster of the Thames Bank desde 1999 y, entre otros honores, la Medalla de Oro del Real Instituto de Arquitectos Británicos (1983); el Premio Mies van der Rohe (1992); la Medalla de Oro del Instituto Americano de Arquitectos (1994); el Premio Pritzker (1999); el Premio Auguste Perret (2002); el Praemium Imperiale (Japón, 2002), el Premio Stirling de arquitectura (2004), el más importante del Reino Unido; el Madrid Creatividad (2006) y el Premio Príncipe de Asturias (2009).