Aguirre afirma que las bajas por covid en sanitarios “se están subsanando” con “planes de contingencia

El consejero de Salud y Familias de la Junta de Andalucía, Jesús Aguirre, ha afirmado este jueves que el aumento de bajas por covid-19 que se está registrando entre el personal sanitario del Servicio Andaluz de Salud (SAS), y que es objeto de críticas por parte de los sindicatos, “se está subsanando con planes de contingencia”.

En este sentido y en declaraciones a los periodistas durante una visita a la Feria del Olivo de Montoro, donde ha asistido a una conferencia sobre Aceite de oliva y salud del profesor de la Universidad Autónoma de Barcelona Eduard Escrich, el consejero ha recordado que “el sanitario es una parte más dentro de la sociedad” y se contagia de covid, como el resto de la población, si bien a los profesionales de este sector “les pedimos aislamiento y un análisis” negativo en coronavirus “previo a su incorporación al puesto de trabajo”.

Ello, según ha reconocido, “supone un volumen importante del personal sanitario público de Andalucía esté ahora mismo en su casa, la mayoría con una evolución favorable, pero con un reposo domiciliario y muchos haciendo teletrabajo”, hasta que den negativo en covid, lo cual “puede afectar a determinados departamentos, sobre todo a nivel de cirugía, a operaciones” y consultas programadas, pero “se está subsanando” y así le consta a Aguirre, “a través de los planes de contingencia que tiene cada uno de los hospitales” afectados.

Ello forma parte de una programación prevista, que está funcionando, pues, según ha argumentado el consejero de Salud, no estamos ante una nueva ola, como en situaciones anteriores, sino que en este caso, “la presión es bastante menor”, de forma que, “sencillamente, se están reprogramando determinadas intervenciones y consultas, de una forma natural y en el mínimo” tiempo posible.

En cualquier caso, Aguirre, quien ha pedido “disculpas” a quienes “se hayan visto afectados” por esta situación, ha subrayado que “Andalucía es la comunidad autónoma con menos incidencia acumulada de toda España”, de modo que “es un tema que no nos preocupa”, ya que “la presión hospitalaria que tenemos ahora mismo es asumible”, al igual que la presión en las unidades de cuidados intensivos (UCI), y “tenemos camas y personal suficiente”.

Además, ante “un problema puntual”, los citados “planes de contingencia” de los hospitales, “como está pasando con el Virgen del Rocío” de Sevilla o “con otros hospitales que tienen una mayor incidencia de positivos entre su personal sanitario”, pues “se va reconduciendo de una forma tranquila y relajada”.

Sin nueva ola

En consecuencia y según ha señalado Aguirre, “aún no podemos hablar” de una nueva ola, dado que “la ce que tenemos actualmente es la misma, es la Omicron BA2” y “no tenemos ninguna cepa nueva que nos pueda alterar la evolución” de la pandemia, aunque sea cierto que “hemos tenido una semana en la que ha subido la presión hospitalaria”, pero “con poca subida a nivel de UCI”.

Es más, “posiblemente mañana baje, de una forma importante, la presión hospitalaria”, por los datos que ya manejan en Salud, con lo que “estamos hablando de subidas y de bajadas”, pero “ahora mismo”, según ha insistido, “no estamos tensionados en el sistema sanitario” público andaluz, “ni en Primaria, ni en hospitalaria, luego no estamos hablando todavía de una nueva ola, ni mucho menos”, sino de “picos en dientes de sierra”.

A pesar de ello y aunque la Agencia de Seguridad Aérea de la Unión Europea (EASA) y el Centro Europeo para la Prevención y el Control de Enfermedades (ECDC) han eliminado la recomendación del uso obligatorio de mascarillas en aeropuertos y a bordo de un vuelo, Aguirre ha llamado a la “prudencia” y a mantener el uso de la mascarilla en interiores.

Por otro lado, el consejero ha recordado que este miércoles ha remitido una carta a la ministra de Sanidad, Carolina Darias, para insistir en pedirle que autorice ya la aplicación de la cuarta dosis de la vacuna contra el Covid-19 en personas mayores de 80 años de edad, ya que es el grupo de edad en el que se está constatando un aumento de la incidencia de contagios.