El proyecto de la gran mina de estaño en Fuente Obejuna, sin fecha prevista y mínimo hasta 2027

Una de las iniciativas que lleva esperando el norte de la provincia de Córdoba. El proyecto minero denominado Oropesa, situado en Fuente Obejuna, continúa envuelto en una gran incertidumbre y no se espera que pueda arrancar, como mínimo, hasta 2027. El motivo principal es la reconfiguración integral del plan, que ha obligado a reiniciar todo el proceso de autorizaciones desde su fase inicial.

Después de la firma del convenio para promover el impacto positivo de la actividad minera en los municipios de Andalucía con el alcalde y presidente de la Federación Andaluza de Municipios y Provincias (FAMP), José María Bellido, el consejero de Industria de la Junta de Andalucía, Jorge Paradela, ha calificado el proyecto como “francamente interesante”, aunque ha recordado que los proyectos mineros son “los más complejos de autorizar” y que, por su propia naturaleza, “llevan tiempo”. En estos momentos, Oropesa se encuentra en la fase clave de autorización ambiental, bajo la supervisión de la Consejería de Sostenibilidad y Medio Ambiente.

Si se cumplen los requisitos legales, el Gobierno andaluz vería con buenos ojos la puesta en marcha de esta iniciativa. En un principio, se esperaba que pudiera estar en marcha en 2024, pero esa fecha se ha pospuesto de manera significativa, más allá de 2027.

El contexto del proyecto se enmarca en la apuesta de Andalucía por fortalecer un sector considerado estratégico. La comunidad es la segunda productora de cobre de Europa y concentra 22 de los 34 minerales críticos definidos por la Unión Europea. En esa línea, la Junta y la FAMP han firmado recientemente un convenio para la creación de la Red de Ciudades Mineras, con el objetivo de impulsar una minería “segura, sostenible y verde”.

Córdoba, con una larga tradición minera que se remonta a la época romana en zonas como el Guadiato y Los Pedroches, cuenta en la actualidad con 64 explotaciones repartidas en 27 municipios. El plan regional de impulso a la minería del siglo XXI incluye líneas de ayudas específicas, la creación de redes de proveedores y empleo local, así como programas de formación especializada.