La Junta autoriza prospecciones para buscar cobre, oro, plata, zinc, plomo, cobalto o níquel en Córdoba
La Junta tramita 32 solicitudes de autorización de investigación minera que sumarían alrededor de 179.430 hectáreas, en su mayoría para localizar y estudiar presencia de sustancias metálicas como, cobre, oro, plata, zinc, plomo, cobalto o níquel, además de algún permiso también para algunos minerales no metálicos como distena, cianita y otros aluminosilicatos o rocas ornamentales.
Desde 2019, se han otorgado en la provincia cinco nuevos permisos para localizar minerales metálicos, e industriales, con una inversión asociada de 1,51 millones de euros, así como la prórroga de otros dos con una inversión asociada de 928.000 euros.
Por otra parte, en cuanto a las solicitudes de explotación de recursos de la Sección A, se han presentado desde 2019 un total de cinco peticiones de autorización de explotación, dos de ellas en el último año.
Los recursos mineros en Córdoba se encuentran distribuidos en torno a 58 municipios de la provincia que albergan 75 explotaciones mineras otorgadas y vigentes, existiendo además un total de 13 permisos de investigación igualmente otorgados y vigentes todos ellos afectando a 17.700 hectáreas. Estos permisos se circunscriben al ámbito de los minerales metálicos como Bismuto, Estaño, Wolframio, cobre, cinc, óxidos de hierro, plomo y hematites, así como a las rocas ornamentales como la caliza, las arenas y gravas.
Los recursos con mayor número de autorizaciones de explotación son los de arenas y gravas, calizas y existiendo algunas de feldespatos y pegmatitas, que aún no se encuentran en explotación en el norte de la provincia.
También están tramitándose varias concesiones mineras, una en el sur para caliza como roca ornamental, otras dos en el norte, una de ellas para fluorita y barita y otra considerada como un gran proyecto e incluida en la Unidad Aceleradora de Proyectos, dirigida a la explotación de Estaño y una cuarta para Fluorita. De estas cuatro concesiones, las dos de Fluorita van en explotación con minería de interior.
Así mismo, debe tenerse en consideración los municipios en los que, sin haber aún actividad de explotación, sí existe un potencial minero que está siendo evaluado en los correspondientes permisos de investigación.
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