El Gobierno diseña la construcción del último gran pantano de Córdoba

De forma recurrente desde el año 2006, los regantes del entorno del río Genil vienen reclamando al Gobierno que recupere un viejo proyecto hidrológico: la construcción de la presa de San Calixto. La obra sería, de ejecutarse, la última construcción de un gran pantano en la provincia de Córdoba, una de las zonas con los cauces más regulados y aprovechados de toda la Península Ibérica. La reserva de agua en la provincia, en caso de que los embalses estén al 100%, es tres veces mayor a la de Sevilla y casi el doble que la de Jaén.

Pero San Calixto no es un embalse más. El proyecto es también muy demandado por los vecinos de Écija y Palma del Río, que reclaman protección ante las inundaciones que provoca el río Genil cada vez que llueve de manera intensa en su cuenca. El Genil es un río también muy regulado, gracias al embalse de Iznájar. Pero aguas abajo el Cordobilla ya está colmatado y todo lo que llueve en su cuenca llega al río de manera descontrolada. San Calixto evitaría, o al menos calmaría, esas grandes avenidas que ponen en riesgo primero a Écija y después a Palma del Río, donde ya desemboca en el Guadalquivir.

A través de una respuesta parlamentaria al diputado de Vox en Córdoba, José Ramírez del Río, el Gobierno señala que ya ha comenzado a redactar el pliego con el que sacar a contratación el diseño de la obra. Ya existe un proyecto, que se concluyó en 2004 pero que nunca se llegó a ejecutar. En 2022, el Gobierno decidió incluir esta obra en el “Programa de Medidas del Plan Hidrológico de la Demarcación Hidrográfica del Guadalquivir”, que estará vigente hasta 2022, según señala en la respuesta parlamentaria. De hecho, dispone de cuatro millones de euros de presupuesto.

“El proyecto para la construcción de la presa de San Calixto está incluido en el Plan de Gestión del Riesgo de Inundaciones, como medida de protección frente a inundaciones del municipio de Écija. El Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico ha llevado a cabo el estudio de coste-beneficio para valorar la viabilidad de la actuación como medida estructural de protección frente avenidas, siendo positivo el mismo”, señala el Ejecutivo. “Es previsible que a lo largo del 2024 se haya redactado y aprobado técnicamente, pudiendo iniciarse entonces el proceso de licitación”, concluye el Gobierno en la respuesta parlamentaria.

El proyecto de 2004 preveía una inversión superior a los 60 millones. Con ese presupuesto, se iba a construir una presa de tipo agujero con una capacidad de entre 80 y 90 hectómetros cúbicos de agua. Su objetivo principal era el de frenar las grandes avenidas de agua del Genil, pero el secundario aportar recursos en periodos más secos para el regadío del Genil Cabra. 

Ahora, el Ejecutivo espera que antes de final de año pueda tener dibujado un mapa concreto sobre qué actuación llevar a cabo en San Calixto. Las obras no arrancarían antes de dos años y es probable que su final se vaya prácticamente a final de la presente década. Sería la última gran presa que se construya en la provincia, después de La Breña II, que entró en servicio en 2008.