La asociación que pide rezar en la Mezquita dice tener financiación extranjera para construir un nuevo templo en Córdoba

La Asociación Cultural Ibn Hazm de Córdoba ha criticado el silencio con el que el Ayuntamiento de Córdoba ha tratado su propuesta para construir una nueva mezquita mayor en la ciudad, financiada con aportaciones de entidades y particulares internacionales. Desde este organismo, vinculado a la Mezquita de los Andaluces, se ha defendido que los actuales espacios de culto en Córdoba resultan “absolutamente insuficientes” para una comunidad musulmana que, según indican, ha crecido de forma exponencial desde finales de los años 70.

En declaraciones a Cordópolis, Alejo Ávalos González, presidente de la asociación e imán de la Mezquita de los Andaluces, ha reconocido que la asociación cuenta con inversores internacionales dispuestos a sufragar el coste de la construcción de un nuevo templo musulmán en Córdoba, donde, según sus cálculos, hay entre 16.000 y 22.000 personas que profesan esta fe. Estos inversores son, según ha desvelado a este periódico, de Turquía, Arabia Saudí (ambos de mayoría suní) y otros países del Golfo Pérsico.

En este sentido, ha remitido a los medios de comunicación, una misiva que le dirigió al alcalde, José María Bellido, el pasado 12 de febrero, en la que reclamaba la cesión del solar del fallido Palacio del Sur —hoy convertido en aparcamiento informal— para levantar un gran complejo cultural y religioso que incluiría, además del templo, un centro docente concertado, biblioteca, hammam ritual y auditorio.

En su misiva, Ávalos recuerda que las cinco salas de oración y la pequeña mezquita existentes apenas pueden acoger a 500 fieles, cifra que se desborda cada viernes y especialmente durante el Ramadán, obligando a muchos a rezar en la calle.

Reivindicaciones históricas

En su escrito, la Asociación Ibn Hazm insiste en que la comunidad musulmana cordobesa lleva más de cuatro décadas reclamando infraestructuras acordes a sus necesidades. Entre sus reivindicaciones figura también la recuperación de la antigua Mezquita de los Cadíes, en la calle Rey Heredia, que en la Edad Media albergó la primera universidad de derecho islámico malikí en Europa y más tarde fue convento de Santa Clara. Según señalan, ya en los años 80 el entonces alcalde Julio Anguita llegó a firmar un acuerdo de cesión que nunca llegó a ejecutarse (y que hoy sigue lejos de ser posible, pues el Ayuntamiento ya trabaja para convertirla en museo de las cofradías).

A pesar de ello, la entidad reclama que ese edificio se convierta en un espacio cultural y académico, con un museo sobre la historia de Córdoba y una universidad islámica. En este punto, subrayan que el proyecto sería financiado con fondos externos y que solo esperan la autorización municipal.

El presidente de la Asociación Cultural Ibn Hazm acusaba en la carta al Ayuntamiento de discriminar a la comunidad musulmana, al impedirles rezar en la Mezquita-Catedral —donde los intentos de oración islámica son frenados por seguridad— mientras que los cordobeses católicos sí pueden practicar su fe en el monumento. “Es una barbaridad en pleno siglo XXI que viola el principio constitucional de igualdad y de libertad de culto”, señala el documento.

La asociación recuerda además que el Consistorio ha cedido suelo a otras confesiones religiosas para levantar templos, “comunidades de mucho menor número de fieles”, por lo que reclaman el mismo trato en función de su peso demográfico e histórico en la ciudad.

Llamamiento al diálogo

Pese al tono crítico, Ávalos asegura en su carta que su voluntad es “cero de generar problemas o conflicto en la convivencia ciudadana”, y se muestra dispuesto a llegar a acuerdos que permitan desbloquear una situación que consideran “urgente”. En ese sentido, lamenta la falta de respuesta de la vicealcaldesa, Blanca Torrent, con la que la asociación mantuvo reuniones en 2024, y pide al alcalde que concrete una fecha para tratar personalmente las dos peticiones principales: el solar del Palacio del Sur y la antigua Mezquita de los Cadíes.

“Existen entidades y ciudadanos particulares internacionales a la espera de este acuerdo para la financiación del proyecto que no entienden la dilación y tardanza”, advierte el presidente de la Asociación Ibn Hazm, que confía en que el Ayuntamiento atienda sus demandas en nombre de los miles de musulmanes residentes en Córdoba.