Hostecor avisa que está en juego una industria con “una pérdida de identidad sin precedentes”

El vicepresidente de la Asociación de Empresarios de Hostelería de Córdoba (Hostecor), Pedro Pablo Fernández Gracia, avisa ante la situación generada por el coronavirus que “está en juego una industria que, de verse subvertida, sufrirá una pérdida de identidad sin precedentes”.

En un comunicado que titula 'La resistencia del abrazo', Fernández Gracia expresa que “está en juego el lugar al que pertenecemos, y al que siempre desearemos volver”, así como “la transferencia social” de los abuelos, “los eternos mediodías del fin de semana, la excitante mesa reservada con los amigos, la orgía improvisada con el gol postrero”.

En su opinión, “están en juego las ganas de vivir”, a lo que añade que “esto no va de poner distancias entre nosotros”. “Esta pandemia nos está enseñando justo lo contrario: a ocuparnos los unos de los otros”, según destaca, para agregar que “la distancia social es sólo una medida sanitaria, y cuando esta acabe, debemos priorizar la tarea de querernos, cuidarnos y arroparnos como nueva norma de relación”.

“Y entonces, y con más fuerza que nunca, la hostelería representará algo esencial de la comunidad: será el espacio ideal para celebrar que no tenemos por qué volver a estar solos, nunca, ningún día”, subraya el vicepresidente de Hostecor, entre otros planteamientos, como el hecho de que “todos los sistemas han caído con apenas dos meses puestos en pausa” y “el orden socioeconómico mundial ha durado 45 días de emergencia sanitaria”.

También, advierte de los consejos de “construir una realidad impostada”, con “una nueva hostelería empaquetada y elaborada en serie”, todo ello “sin elemento diferencial, con distancia social y protocolos sanitarios por bandera”, cuando la hostelería en este territorio es “el resultado directo de nuestra manera de ser y de convivir”.

Prueba de ello, el vicepresidente de Hostecor apunta que el sector “resistió, como ninguno, los continuos intentos de invasión foránea y globalización en forma de franquicias y otras formas de homogeneización”, destacando el valor de la taberna y el bar de barrio, las terrazas. “Nuestra hostelería muestra quienes somos”, enfatiza Fernández Gracia, quien invoca a “la hermosa resistencia del abrazo” y se declara “activista del contacto en tiempos de mampara”.