¿Invertir en vivienda o en la Bolsa?
Dada la situación actual en la que estamos viviendo con la crisis sanitaria y la crisis económica, parece ser que está aumentando el ahorro en las familias para poder hacer frente a la incertidumbre que nos espera en los próximos meses.
Ahorro para imprevistos, pero también para ser destino de alguna inversión que pueda surgir en la coyuntura actual.
Los depósitos a plazo fijo en los bancos a penas nos dan un interés casi del 0%, muchos han sido los ahorradores que se han visto obligados a buscar otras alternativas para intentar rentabilizar su ahorro.
Se estima una bajada en el precio de la vivienda, una mayor oferta en pisos a vender y un incremento en la oferta de pisos en alquiler.
La vivienda para destinarla al alquiler ha sido una alternativa al depósito a plazo fijo tradicional, todos los meses se espera cobrar del inquilino una renta.
Para garantizar el cobro del alquiler han proliferado los seguros de pago de inquilinos, pero también con la subida de los alquileres y situación laboral se han ido incrementado los impagos de rentas de alquiler.
Otra alternativa de inversión es la Bolsa, bien directamente con la compra de acciones o a través de fondos de inversión.
Muchos se pueden hacer la siguiente pregunta, ¿me interesa más invertir en la Bolsa o comprar un inmueble para alquilar?.
Factores que debemos entender antes de tomar esta decisión.
Tanto si se invertimos en Bolsa como si compramos un inmueble para alquiler, existe el riesgo de pérdida de nuestro dinero invertido.
Recordemos la famosa crisis financiera allá en el 2008, pocos eran los que pensaban que el precio de su vivienda podría bajar, bajó incluso por debajo de la hipoteca que debían al banco.
En la Bolsa también se experimentan pérdidas, basta mirar las pérdidas de todas las Bolsas mundiales del mes de marzo de 2020 a raíz de la crisis sanitaria del coronavirus.
El riesgo de pérdida de nuestro dinero existe tanto en la vivienda como en la Bolsa, la clave está en si nos vemos obligados a vender o podemos esperar a tiempos mejores.
La compra de una vivienda nos supone un esfuerzo económico mayor que la inversión en la Bolsa y no todos podemos destinar parte de nuestro ahorro a comprar una vivienda.
En la Bolsa podemos obtener la misma rentabilidad con un desembolso menor que en la compra de una vivienda, incluso ha habido una serie de años que se ha obtenido mayor rendimiento, aunque no siempre ha sido así.
La rentabilidad en la Bolsa que nos puede llegar por los dividendos de las acciones que cobremos más la revalorización de las acciones.
En la inversión en la vivienda la rentabilidad nos vendrá por la renta del inquilino y por la revalorización del precio de la vivienda.
Un factor a considerar de suma importancia es el referente a la liquidez, es decir, a la facilidad de hacer dinero la inversión que hemos realizado.
Imaginemos que hemos destinado todo nuestro ahorro a la compra de una vivienda, en un determinado momento nos surge un imprevisto y necesitamos con urgencia 5.000€.
En el supuesto de que nuestro ahorro esté todo invertido en la Bolsa, bastará con dar una orden de venta de acciones por el importe que necesitemos, el riesgo en esta ocasión estará en ver si perdemos motivado porque el precio de venta de las acciones sea inferior al precio de comprar.
Pero si hemos invertido en una vivienda, ¿cómo consigo los 5.000€ que me urgen, voy a vender las puertas de la vivienda o las ventanas?.
Siempre antes de invertir, analicemos nuestras circunstancias personales, seamos conscientes de los riesgos y posibles oportunidades, comprendiendo en qué vamos a invertir.
Cada uno de nosotros somos diferentes, dice el refrán que “los huevos se coloquen en diferentes cestas, no pongamos todos los huevos en la misma cesta”.
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