La cuarentena lejos de casa: Fernández, confinado en Chipre

De capitán cordobesista a titular en el AEK Larnaca de Chipre. Parece el comienzo de una película, pero es el cambio de vida que ha sufrido José Manuel Fernández en apenas tres meses. Ahora, tras asentarse en la liga chipriota y ganarse un sitio en el once, le toca estar confinado en su domicilio fuera de su casa y lejos de su familia. Una cuarenta que él cree que se está llevando mejor en su actual país que en España. “Aquí en Chipre, desde el momento que detectaron que el virus podía ser una amenaza, el Gobierno se puso manos a la obra cerrando fronteras, aeropuertos...”, afirma el cordobés a CORDÓPOLIS.

Una mudanza a la otra punta de Europa con el fútbol como principal protagonista. El canterano cordobés buscó suerte en el AEK Larnaca para seguir formándose como futbolista. Fernández explica que “es un club grande que está creciendo muchísimo a nivel institucional y futbolístico”. Además, la entidad chipriota ha conseguido clasificarse para un play off que les puede asegurar una plaza en la Europa League. “La temporada, desde que llegué, no ha sido la esperada, ya que hay mucho potencial en la plantilla para estar más arriba, pero hemos conseguido el principal objetivo”, aclara.

Por otro lado, el lateral sigue con un ojo puesto a lo que ocurre en España. “Es una pena que hayamos tenido que llegar a estas circunstancias cuando se podían haber evitado que haya los contagios que hay a día de hoy”, asevera un Fernández que está en continuo contacto con su familia y amigos. “Hablo con ellos a diario para saber cómo están. Por el momento está todo bien”, explica. Además, el zaguero hace hincapié en que todos deberían seguir las recomendaciones implantadas por el Gobierno. “Si todos remamos juntos venceremos este virus mucho antes que si lo hacemos por separado”, apunta el excapitán cordobesista.

Los problemas extradeportivos marcaron su estancia en el club califa. El lateral explica que su paso por el Córdoba ha sido una montaña rusa con más bajadas que subidas. “Siempre pasaba algo y nunca se hablaba de fútbol” y se convertía en una situación “inestable”, según el propio jugador. Pero los actores principales pronto se refugiaron en el fútbol y en el activo más importante del club, la afición. “Los futbolistas dejamos a un lado los problemas que cada día nos envolvía para solo aferrarnos a que nuestra gente estaba con nosotros”. Además, Fernández está seguro de que sus compañeros conseguirán el ansiado objetivo del ascenso, aunque el cordobés dejara el barco a mitad de camino. “El Córdoba creo que tiene la mejor plantilla del grupo IV y lo va a demostrar”, indica.

Por el momento, el zaguero cierra la puerta a una posible vuelta en un plazo corto de tiempo. “Tengo dos años más de contrato aquí y estamos muy a gusto en Larnaca con dirigentes que nos hicieron sentir como en casa”, afirma un excapitán cordobesista que también recuerda su pasión por el club de su tierra. “Soy del Córdoba CF desde que tengo uso de razón y si algún día me necesitan, estaré encantado de ayudar en lo que esté en mi mano”, asegura. Un lateral y una entidad cordobesa que tendrán que luchar antes por la desaparición del Covid-19, para seguir logrando los objetivos marcados a principios de temporada.