Adelante critica la “sangría de cierres” en colegios públicos y que el Gobierno andaluz repita “errores”

La portavoz de Adelante Andalucía en la Comisión de Educación del Parlamento andaluz, la cordobesa Ana Naranjo, ha criticado este lunes la “sangría de cierres de aulas”, en más de una veintena de centros educativos públicos de la provincia de Córdoba que tendrá lugar para el próximo curso escolar, según la previsión inicial de la Delegación de Educación de la Junta de Andalucía en la provincia.

A este respecto y en un comunicado, Naranjo ha lamentado que el Gobierno andaluz de PP y Cs “se empeñe en repetir los mismos errores año a año”, y esté dispuesto a “desaprovechar una nueva oportunidad para bajar la ratio en las aulas de cara al próximo curso escolar”, pese a que ello permitiría “una educación más segura, pero también de mayor calidad”, ya que “el propio consejero ha admitido que los refuerzos Covid han contribuido a combatir el fracaso y el abandono escolar”.

Además, la parlamentaria andaluza por Córdoba de Adelante Andalucía (Unidas Podemos por Andalucía) ha advertido que “la amenaza de la pérdida de unidades se cierne sobre centros que ya se encuentran muy debilitados, tras los cierres de los últimos años, como el CEIP Hernán Ruiz”. Se trata de uno de los diez centros de la capital que se verán afectados, y que, “pese a que el curso pasado ya perdió una unidad en Infantil, ahora está en riesgo de correr la misma suerte con un aula en Primaria”.

Para Naranjo, el “goteo constante de cierres al que asistimos año a año” forma parte de una “estrategia a medio plazo para debilitar la escuela pública con la excusa de la baja natalidad, que al Gobierno andaluz le sirve de justificación para cerrar unidades públicas, pero no para tocar los conciertos educativos con colegios privados”.

Precisamente, para Naranjo esa baja natalidad debería ser “la excusa perfecta para adaptar y mejorar de una vez el sistema público de Educación mediante una reducción de ratios que hiciera posible una atención más personalizada, en beneficio del alumnado y del profesorado”. Pero, con la eliminación de plazas anunciada para 21 centros de la provincia, “el Gobierno andaluz renuncia a su verdadera labor, que es la de velar por una educación de calidad, y condena a una mayor precariedad a la red pública de centros”.

Esta realidad es “especialmente preocupante” en municipios como Cardeña, que además de perder la escuela rural de la aldea de Venta del Charco, “con la excusa de que recibirán una mejor atención en el colegio del municipio, se enfrenta ahora a la pérdida de una unidad en ese otro CEIP”, por lo que “los argumentos de Educación caen por su propio peso, ya que están cerrando aulas en colegios donde el número de alumnos va a crecer”.

Naranjo ha pedido a la Delegación de Educación “sensibilidad” con las particularidades de las zonas rurales, así como con la diversidad en las aulas, una realidad a la que hay que responder “con una atención más individualizada, que difícilmente va a ser posible en un aula con un docente para 25 niños”.

Es el caso del CEIP Virgen de la Salud en Castro del Río, donde hay alumnado de Infantil con necesidades específicas que, tal y como han alertado ya sus padres y madres, “no va a poder ser atendidas con garantías si no se produce un refuerzo de personal y de medios que permita desdoblar aulas”.

Por todo ello, Naranjo ha pedido a la Delegación de Educación que “atienda a las demandas de la comunidad educativa de este centro, y escuche lo que tienen que decir las familias y el personal docente, para orientar la toma de decisiones hacia objetivos que realmente beneficien a la educación pública como derecho fundamental, que el Gobierno autonómico está obligado a garantizar”. Naranjo ha recordado que en la última década se han perdido 400 unidades públicas en la provincia, y ha subrayado que “cuando existe un problema de aulas masificadas no puede usarse la baja natalidad como excusa para cerrar unidades”.