El PP lamenta que la piscina cubierta de Figueroa “aún esté cerrada”

El portavoz del Partido Popular (PP) en la Diputación, Andrés Lorite; su portavoz en el Ayuntamiento de Córdoba, José María Bellido, y el diputado provincial por esta formación Agustín Palomares lamentaron este martes que la piscina cubierta y las pistas adyacentes que iban cubiertas en el Parque Figueroa “aún estén cerradas”. Un hecho que se produce tras culminar las obras de la piscina en abril de este año después de “14 años de espera”.

En declaraciones a los periodistas, Lorite explicó que “en el año 2004 se firmó un convenio de colaboración entre la Junta de Andalucía y la Diputación para que en este espacio, propiedad de la institución provincial, se construyera una piscina cubierta para dar servicio a la sociedad cordobesa”.

En este sentido, apuntó que “la construcción de dicha piscina cubierta sería sufragada en un 50% por parte de la administración autonómica y un 50% por parte de la Diputación”. Pero “después de multitud de avatares, incluida la resolución de múltiples deficiencias de estructura que se produjeron durante la construcción, del presupuesto inicial de dos millones de euros, se culminaron las obras por un importe en torno a 3,5 millones de euros”.

Además, comentó que en el proyecto estaban incluidas más instalaciones deportivas, “que finalmente se optó por no llevarlas a cabo”, a lo que añadió que en el año 2012 “hubo que repensar el proyecto y reconstruir parte de lo que se había construido mal”. De esta forma, “la Diputación entonces gobernada por el PP tuvo que hacer una inyección económica importante para culminar esta actuación, que hoy ya está finalizada”.

De hecho, Lorite recordó que en el mes de junio preguntó al presidente de la Diputación, Antonio Ruiz, sobre “la situación de esta obra y la apertura al público”. A tal efecto, agregó, “se comunicó que la obra estaba culminada y pendiente por parte de la Diputación de tener un encuentro con la Junta para formalizar el acta de entrega para poner ya en marcha de una forma definitiva esta instalación deportiva tan importante”.

No obstante, señaló que “llega final de año y la piscina aún está cerrada”, motivo por el que este miércoles en el Pleno de la Diputación le va a formular al presidente las mismas preguntas. “¿Qué pasa con este equipamiento? ¿Cuándo tienen previsto ponerlo en marcha? ¿Pretenden o no formalizar un convenio de colaboración con el Ayuntamiento, que sería lógico para la gestión del equipamiento? ¿Cuándo se va a poder disfrutar de una vez por todas de una instalación deportiva que lleva demorándose en su ejecución durante muchos años?”, cuestionó.

El modelo de gestión

Mientras, el portavoz del PP en el Consistorio, José María Bellido, cuestionó “por qué después de seis meses esto está cerrado” y “qué modelo de gestión es el que quieren poner en marcha los responsables del PSOE en la Diputación y el Ayuntamiento”. En este sentido, instó a contar con “un convenio para abrir esta piscina”.

Al respecto, declaró que “hay muchos usuarios que desean hacer uso de la piscina, unos de clubes deportivos, otros vecinos y clubes con deportistas con unas características especiales”. Por esto consideró que “hay que tomar decisiones” sobre la gestión y “abrirla ya”. Bellido apostó por la participación en este caso, “fundamentalmente de la asociación de vecinos”.

Por todo ello, el concejal avanzó que el PP preguntará en el Instituto Municipal de Deportes (Imdeco) al presidente, el edil Antonio Rojas, para que diga “qué gestiones se realizan desde el Instituto de Deportes con la Diputación para poner en marcha esta instalación”.

Mientras, el diputado provincial del PP y quien fuera delegado de Juventud y Deportes en el anterior mandato en Diputación, Agustín Palomares, incidió en que “la obra de este proyecto se inició hace diez años y a día de hoy todavía no está puesta en valor con la importancia que tiene, tanto para este barrio como para los colectivos y asociaciones que están vinculadas a este proyecto”.

Asimismo, pidió a las instituciones que tengan en cuenta que “lo que queda es lo más fácil, que es un tema meramente burocrático”. Así, aseguró que “no hay excusas ningunas para que esta instalación siga cerrada al público”.