El organismo asesor de la Unesco advirtió sobre el almacenaje de enseres y maquinaria en el interior de la Mezquita de Córdoba

Juan Carlos Molina Gaitán, presidente del Comité Nacional Español de Icomos (Consejo Internacional de Monumentos y Sitios), ha reconocido este martes que, durante una visita realizada en primavera de este año a la Mezquita-Catedral de Córdoba, su organización había abordado con el Cabildo la cuestión del almacenaje de enseres y maquinaria dentro del monumento, y que, en aquel momento, la institución eclesiástica les informó de que estaban trabajando en la adquisición de espacios externos para este fin.

El presidente de Icomos ha hecho mención a este hecho tras visitar este martes la zona afectada por el incendio que asoló una de las naves el pasado viernes, tras la cual ha atendido a los periodistas. Lo ha hecho con un tono muy conciliador, defendiendo la gestión que ha hecho el Cabildo tanto de la catástrofe sobrevenida, como en general con el mantenimiento de este inmueble milenario, Patrimonio Mundial de la Humanidad.

De hecho, Molina Gaitán ha intentado no hablar ni de “errores” ni de las posibles causas que habrían provocado el incendio -desde el principio, la hipótesis es que fue una barredora eléctrica junto a una zona en la que se apilaba mobiliario-. No obstante, sí que ha reconocido que, en su última visita, este mismo año, el tema del almacenaje exterior, particularmente para maquinaria eléctrica, fue comentado. Según sus declaraciones, el Cabildo les había comunicado que estaban “detrás de tener ese espacio” (concretamente, dos locales en las cercanías del templo).

“Les ha pillado este por poco”, ha lamentado el presidente de Icomos, que, en general, ha elogiado la gran transparencia del Cabildo de Córdoba, que ha facilitado toda la documentación e información requerida. Así, ha recordado que, desde septiembre, Icomos y el Cabildo mantienen una mesa de trabajo que nació a petición de la Plataforma Mezquita de Córdoba y que, en el marco de este organismo, se hará un seguimiento de las labores de reconstrucción del patrimonio dañado, y de la investigación sobre las causas del fuego.

Así, ya ha adelantado que Icomos no tiene previsto elaborar documentos de evaluación de impacto patrimonial directamente, para evitar ser “juez y parte”. “Nuestro papel es el de analizarlos y elevarlos a la Unesco”, ha aclarado, destacando que el Cabildo cuenta con personal totalmente cualificado para ello. De hecho, a su juicio, los protocolos establecidos funcionaron bastante bien.

En este sentido, ha resaltado el gran equipo profesional con el que cuenta el Cabildo en la gestión de la Mezquita de Córdoba. No obstante, aunque el Cabildo, en su opinión, tiene un buen sistema de identificación de amenazas y vulnerabilidades, ahora toca “darle una vueltecilla” para seguir mejorando y aprender de “los errores” (una palabra de la que luego se ha desdicho).

Para ello, ha apostillado que toca trabajar en la identificación de riesgos para tomar medidas de prevención adecuadas y que, de hecho, Icomos ya tenía programado para un mini-curso con el Ayuntamiento de Córdoba y el Cabildo sobre la evaluación de impacto patrimonial y los planes de salvaguarda y autoprotección.

En cuanto a las medidas de urgencia postincendio, ha remarcado que no son aún obras de restauración, sino medidas encaminadas a la emergencia, y ya cuentan con los permisos necesarios, habiéndose actuado con mucha rapidez. Posteriormente, se realizarán estudios detallados, como el análisis del hollín, para elaborar un proyecto de restauración que cumpla con los requisitos de la Unesco.