Economía social en tiempos de crisis

La viceconsejera de Conocimiento, Investigación y Universidad, María Luz Osorio, ha destacado la fortaleza de la economía social durante los tiempos de crisis y su capacidad para generar empleo estable y de calidad, “manteniendo un reparto de beneficios más justos y promoviendo actitudes más igualitarias”.

Durante su intervención en el Encuentro Internacional de Economías Transformadoras, que se celebra en Córdoba organizado por la Red de Redes de Economía Alternativa y Solidaria de Andalucía, Osorio ha a subrayado el compromiso del Gobierno andaluz con este sector a través del desarrollo de un marco normativo y una serie de medidas que tienen como finalidad “desarrollar su tejido, mejorar su competitividad y empleo para contribuir a un mayor desarrollo socioeconómico de Andalucía”.

En ese sentido, ha aludido a los Pactos Andaluces por la Economía Social firmados en 2002, 2006 y 2011 y al Acuerdo por la Economía Social Andaluza, firmado en 2013, con representantes del sector, sindicatos y otros agentes, así como a la reciente aprobación de la Ley Andaluza de Fomento del Emprendimiento, la nueva Ley de Cooperativas, aprobada en junio del 2018 en el Parlamento de Andalucía. Con respecto a este último texto legal, la responsable de Conocimiento ha explicado que recoge medidas “novedosas” como la reducción a dos socios la exigencia para constituir una cooperativa.

Esta ley convierte a Andalucía, a su juicio, “en una de las comunidades españolas con una legislación más flexible en la puesta en marcha de este modelo de sociedades”.

Osorio ha definido a este marco legal como “un marco flexible con capacidad de ir adaptándose a las necesidades del sector y a los de una sociedad en permanente cambio, capaz de estar abierto a la suma de los intereses y voluntades de los distintos actores que hacen posible el desarrollo de economías transformadoras en nuestro territorio”.

Por otro lado, se ha referido a las iniciativas y medidas desarrolladas y que complementan esta regulación normativa, como es el caso del Programa de Relanzamiento de la Economía Social (PROGRESA), que “apuesta claramente por la transversalidad de la economía social, y que persigue ser un dinamizador del sector para potenciar su papel de actor clave en el tejido productivo de Andalucía”, ha dicho.

Durante su discurso, Osorio ha puesto el acento en la importancia de la participación como elemento de cohesión y de corresponsabilidad dentro de este segmento, aludiendo a la constitución del Consejo Andaluz de la Economía Social. Se trata de un órgano de carácter consultivo, “abierto al debate y a la construcción colectiva de estrategias que permitan fortalecer al sector y ganar en visibilidad, competitividad y en generación de bienestar para nuestros territorios”, ha indicado.

A juicio de la viceconsejera de Conocimiento, “es necesario facilitar un cambio de rumbo en el sistema socioeconómico, que permita la transición desde la actual situación económica, social y ambiental a otra etapa basada en una sociedad justa, sostenible y solidaria que propicie una economía regenerativa, con una clara mirada de género, en cuyo centro estén los intereses de las personas”.

Los principales datos de la economía social

Este segmento de actividad representa el 8% del PIB andaluz. El número de empresas roza las 6.000, en su gran mayoría cooperativas (3.921) y sociedades laborales (1.987), que suponen un 19,7% del total nacional y generan 79.326 empleos (20,6%).

Andalucía es la segunda autonomía de España en número de cooperativas y la primera en trabajadores. Un 49,96% de empleo es indefinido, frente al 50,04% de empleo temporal. En términos de equidad, por ejemplo, la relación entre hombres y mujeres es de 50,1% frente al 49,9%, respectivamente.