Los directores de los centros advierten de que no pueden “garantizar la vuelta de forma presencial”

La Junta Directiva Regional de la Asociación de Directores de Educación Infantil, Primaria y Residencias Escolares de Andalucía (Asadipre) ha emitido un comunicado en el que afirman que, hoy por hoy, no se puede “garantizar la vuelta a las aulas de forma presencial en un entorno escolar seguro en las actuales condiciones de espacios e infraestructuras y con el personal del que disponemos”.

El comunicado, suscrito por más de 150 centros públicos de Córdoba, llega tras la primera reunión de la Mesa Sectorial de Educación, celebrada este martes, y en la que la Junta comunicó la contratación de 4.000 profesores de refuerzo y la realización de test a los docentes antes del inicio del curso.

A pesar de ello, Asadipre ha insistido en que, en las condiciones actuales y a pesar de estos anuncios, ve imposible “dar cumplimiento a las medidas establecidas en las instrucciones de la Viceconsejería”, y duda de que se puedan abrir los centros para la atención al público el día 1 de septiembre.

En este sentido, afirman que las Instrucciones que se publicaron el 6 de julio -y que no se han modificado sustancialmente tras la primera reunión de la mesa sectorial- “deben de ser revisadas y ampliadas en algunos aspectos para la apertura de los centros

educativos a partir del 1 de septiembre“.

Concretamente, Asadipre recuerda que la limpieza y desinfección de los centros es “un pilar ineludible a la hora de proporcionar un entorno que minimice los riesgos de contagio”, por lo que sostiene que los ayuntamientos “deben certificar la limpieza y desinfección previa a la apertura de los centros y los protocolos de limpieza y desinfección diarios durante la presencia del alumnado por la mañana y, posteriormente, por la tarde, con el centro ya vacío”. Y piden, en este ámbito, un plan detallado sobre cómo se va a acometer la limpieza.

Sin haber reducido la ratio, no se podrá asegurar la distancia de seguridad

Por otra parte, pide a las autoridades sanitarias un protocolo concreto para afrontar la prevención contra el coronavirus. “Las direcciones de los centros no podemos responsabilizarnos del diseño, ni de las medidas sanitarias necesarias”, afirman, al tiempo que solicitan “la planificación para la adquisición y reparto con antelación del material higiénico sanitario (mascarillas, termómetros, soluciones hidroalcohólicas, pantallas faciales, alfombras, etc.) necesario para prevenir los contagios y transmisión del virus”.

Por otro lado, aclaran que dado que la Junta no ha reducido la ratio de alumnnos por clase ni ha contratado “al profesorado necesario para realizar agrupamientos más pequeños”, no se podrá “asegurar la distancia de seguridad que establecen las autoridades sanitarias”, lo que implicará que “todo el alumnado de Educación Infantil y Primaria, así como el personal del centro deberán tener puesta la mascarilla durante toda la jornada escolar”.

Demandan también que se aclare “cuáles son los procedimientos que se van a seguir para asegurar el desarrollo de los Servicios Complementarios (Aula matinal, Comedor y Actividades Extraescolares)”, así como que provean “la dotación inmediata de equipamiento informático no sólo al profesorado, sino para muchas de las familias del alumnado que carecen de equipos informáticos, conexiones a internet y habilidades específicas para el teleaprendizaje”.

Por todo ello concluye Asadipre: “Si no se atienden estas medidas que entendemos de seguridad mínima sanitaria con el fin de no convertir a los centros educativos en epicentros de brotes epidemiológicos, con el consiguiente riesgo para la salud y la vida de cientos de personas, las directoras y directores entendemos que ante cualquier situación de contagio sobrevenida, los responsables de los mismos no serían las direcciones escolares, ya que no contamos con los recursos necesarios para afrontar esta situación, sino que dicha responsabilidad ha de recaer sobre la propia administración, la cual sí dispone de los medios necesarios para facilitar la aplicación de los protocolos que han de ponerse en marcha al inicio de curso”.