Una cordobesa en Manchester: “Te sientes muy intranquila sabiendo que ha pasado a tu lado”

La alarma provocada por el atentado terrorista sufrido la pasada noche en Manchester pilló, por suerte, en casa a una cordobesa que trabaja justo al lado del Manchester Arena donde tuvo lugar el ataque. Soraya Martínez, de 26 años, es asistente en el National Football Museum, donde anoche también se celebraba un evento que tuvo que ser desalojado tras el atentado. Ella estaba entonces fuera de su horario laboral y se encontraba en su piso, en el centro de la ciudad, desde donde ha vivido una larga noche de sirenas, ambulancias y helicópteros del férreo control policial establecido, control que mantiene acordonada la zona del atentado imposibilitando que haya podido ir a trabajar este martes.

“Me enteré por una amiga que me escribió por whatsapp y me fui a ver la televisión a ver qué decían las noticias”, relata a este medio. Enseguida comenzó el aluvión de mensajes y llamadas de amigos y familiares, que se ha prolongado durante horas -atiende a Cordópolis justo después de hablar con su familia por Skype-. “La gente empieza a escribirte sabiendo que trabajo aquí, justo al lado del Manchester Arena. Empiezas a preocuparte más todavía y las imágenes son.... (deja en el aire el calificativo del horror que se ha podido ver). Sabiendo que ha pasado tan cerca....”, explica sobre la intranquilidad vivida.

“Cuando ves que tu familia y tus amigos se preocupan por ti, y ves por la mañana que desalojan el centro comercial cuando pensabas que ya iba a volver todo a la normalidad...pues te sientes muy intranquila”. Y es que, además, hace poco que estuvo en el lugar mismo del atentado: “Hace menos de un mes estuve yo allí en un concierto y piensas..., podía haber estado ayer”.

Soraya, que vive en Manchester desde septiembre de 2011 y acaba de terminar allí los estudios de Turismo, cuenta cómo la situación en la zona ha hecho que no haya podido acudir hoy al trabajo. “Esta mañana mi manager mandó un email a todos los empleados, explicando que la zona seguía acordonada, que no fuéramos a trabajar”. Desde anoche, cuenta que no ha salido de casa para nada. “La policía aconseja que nos quedemos en casa. Han pedido que la gente no vaya al centro para que puedan trabajar y seguir investigando”.

Y es que toda la zona cercana al Manchester Arena permanece acordonada por la policía. “Todo está cerrado” comenta y explica la “incertidumbre” aún de la situación. “Bastante intranquila sí estoy. Mi novio ha salido a trabajar ahora y la verdad es que no me hacía ninguna gracia que saliese al centro... Pero hay que hacer vida normal”, dice autoconvenciéndose.

“Espero que vuelva todo a la normalidad lo antes posible. Trabajas tan cerca de la zona del atentado...Y también que no es la primera vez que pasa” señala recordando cómo en 1996 el centro de la ciudad sufrió un atentado con bomba del IRA que hirió a más de doscientas personas. “Para mucha gente es como si se hubiera repetido la historia”.