Las agencias de viajes alzan la voz para pedir ayudas al sector

Los profesionales de las agencias de viajes de Córdoba han protagonizado este miércoles una concentración ante la Subdelegación del Gobierno para reclamar ayudas al sector en la actual situación de crisis económica por el coronavirus.

En un acto de protesta que se ha desarrollado sobre las 12:00 y convocado por la Asociación Plataforma Derechos Agencias de Viajes (PDAV) en las capitales de toda España, los profesionales de las agencias de viaje han pedido a las administraciones soluciones a la situación de un sector en el que, en todo el país, 15.000 puestos de trabajo están en juego.

En Córdoba, han sido convocados a la concentración de protesta todos los agentes de viajes y colaboradores del sector, transporte, guías turismo, hoteles, restaurantes y comerciales. Han querido mostrar, con todas las precauciones y medidas de seguridad para evitar contagios, que estan en pie para reclamar que las administraciones respondan a sus demanas.

Según los promotores de la protesta, la asociación “ha nacido durante el confinamiento” y en tan solo dos meses ya son más de 400 socios que no se sentían “representados por las asociaciones tradicionales o que albergan entre sus socios a grandes grupos como a pequeñas agencias que ven sus intereses enfrentados”.

Así, explican que, a pesar de haber mantenido varias reuniones con miembros del Gobierno de España y de diferentes comunidades autónomas, así como miembros de algunos partidos, “al final nos vemos abocados al cierre, al despido masivo de agentes, a las inmensas pérdidas económicas y a un amenazante cúmulo de denuncias entre clientes, agentes y mayoristas”.

Para abrir sus negocios consideran necesarias una serie de medidas como seguridad jurídica para sus clientes; una normativa clara de las cancelaciones surgidas por la crisis del Covid-19; la continuación de Ceses de Actividad hasta Diciembre 2020 y de los ERTE hasta que la actividad sea la misma que la anterior al estado de alarma; así como evitar que la política interna de las aerolíneas se haga según sus criterios, sino “tal y como los clientes han comprado sus billetes”, entre otras cuestiones.