Zamora despierta a Palma del Río del sueño

Sesenta minutos han privado a Palma del Río de competir el próximo curso en Liga Asobal. Los palmeños, pese al mal inicio, dominaron el encuentro en gran parte del mismo, aunque fue el Balonmano Zamora el que estuvo más inspirado en los últimos segundos (17-18). El sueño se le ha escapado a la entidad cordobesa, aunque no debe empañar el magnífico curso que ha protagonizado.

Inicio demoledor del Balonmano Zamora, el otro gran favorito del torneo, que arrancaba el partido mostrando una marcha más que la entidad local. Con una superioridad notable se iban los zamoranos hasta los cuatros tantos de distancia a los seis minutos de juego, lo que obligaba al técnico palmeño a pedir tiempo muerto para frenar la sangría. Una pausa que sirvió de alivio y reconstrucción, ya que el ARS Palma del Río volvió a la cancha más activo, y mediante una mayor actividad en el juego logró igualar la contienda en apenas cinco minutos (4-4). Y en esas seguiría el guion del choque, ya que de nuevo los visitantes impusieron su juego para despegarse otra vez hasta los tres puntos, y otra vez el ARS se vería obligado a tirar de orgullo para no perderle la cara al partido antes de tiempo. No obstante, la segunda reacción le sentó mejor a los cordobeses, los cuales se hicieron con su primera ventaja a los 23 minutos (8-7). Una pequeña superioridad que, apoyaba en el protagonismo de Manu López desde atrás, no perderían hasta el ecuador, al cual se llegó con el resultado de 9-8.

Tras la salida de vestuarios, la igualdad se impuso en el devenir del encuentro. Cada acometida zamorana era respondida de manera magnífica por el club cordobés. Además, la reacción de Jesús Morales, que convertía en estos momentos su cuarto gol, así como las intervenciones de Manu López hacían que el Palma del Río mantuviera en todo momento su pequeña renta en el luminoso. Así, en los últimos diez minutos se entró con 16-15, y con toda la grada volcada en busca del sueño del ascenso. Cada minuto que pasaba el regreso a Liga Asobal estaba más cerca. Sin embargo, todo dio un giro inesperado al final. La emoción reinó en los dos últimos minutos, a los cuales se llegó con uno de renta para el Balonmano Zamora. El nerviosismo de la grada se contagiaba a la cancha, ya que cualquier fallo reducía a la mínima las esperanzas. No obstante, no hubo fortuna, y las buenas paradas del guardameta visitante llevaron hasta la victoria a su equipo, y por ende, al ascenso a la máxima categoría del balonmano nacional. Unos instantes cargados de polémica, debido a la tensión en ambas filas, y a cuyo desenlace se llegó con el 17-18 definitivo.