Suspendida 'in extremis' la expulsión de un joven que huyó a Córdoba tras protestar contra el régimen nicaragüense

El Juzgado de Instrucción número 2 de Córdoba ha acordado la suspensión de la expulsión y puesta en libertad de un joven que llegó a Córdoba huyendo del régimen nicaragüense de Daniel Ortega tras participar en manifestaciones rechazando la política del ex guerrillero sandinista.

Según ha podido conocer este periódico, el joven de 29 años fue detenido por la Brigada de  Extranjería de Córdoba el pasado viernes para ser devuelto a Nicaragua. La  devolución estaba prevista para las 00:15 del domingo en vuelo regular  desde el aeropuerto Adolfo Suárez-Madrid Barajas debido a su situación  irregular en España. Tal y como relata a Cordópolis el abogado del joven, Manuel Reyes, la solicitud de la suspensión de la expulsión fue “todo un reto a contrarreloj” para lo que se necesitó “la presentación de tres solicitudes  ante el Juzgado de Guardia, siendo la última y definitiva la que estimó” la petición del letrado cuando el joven “ya viajaba a Madrid en un furgón de la Policía Nacional camino del aeropuerto”.

El chico llegó a España en enero de 2020, huyendo del régimen del presidente Daniel Ortega tras haber participado en las protestas de 2018. En  aquel momento se encontraba estudiando mecánica automotriz en el Centro Tecnológico Naciones Unidas San Isidro, de Matagalpa (Nicaragua), y se unió a  las manifestaciones contra el régimen liderando un grupo de compañeros de estudios,  “motivo por el que fue fichado, detenido, agredido y amenazado, así como por  hacer guardia en la iglesia católica de su pueblo, Jalapa, para evitar el desmantelamiento” de la parroquia “y que echaran a  su párroco”.  

Desde abril 2018 a diciembre de 2019, el opositor consiguió vivir  escondido en su país hasta que logró huir a España, donde llevaba  residiendo desde enero de 2020 con familiares con residencia legal.  Durante el sábado, Reyes solicitó el asilo político por correr peligro su integridad física, su libertad y su  vida de regresar a su país, formuló recurso frente a la resolución que ordenaba  la expulsión ante los Juzgados de lo Contencioso-Administrativo y, con ello,  solicitó al Juzgado de guardia la adopción de medida cautelarísma de suspensión de la expulsión. Finalmente, el Juzgado de  Instrucción número 2 de Córdoba, en funciones de guardia, acordó suspender la  expulsión, sin perjuicio de la resolución que el juzgado competente pueda adoptar.  

Esto obligó a que la Policía Nacional cambiara el rumbo, regresando a Córdoba, donde el joven quedó en libertad. En palabras de su abogado, “su traslado a  Nicaragua habría supuesto las represalias del régimen”.