Silbon cierra 2020 con una facturación de 12 millones de euros
Silbon alcanzó en 2020 una facturación de 12 millones de euros en ventas brutas en donde el peso del canal online ha copado el 38 por ciento de las ventas. La marca de moda masculina, que nació en Córdoba, ha esquivado la crisis provocada por la pandemia del Covid-19 gracias a su estrategia omnicanal a través de la cual ha llevado a cabo la apertura de seis nuevas tiendas, ha fortalecido su ecommerce y apostado por el outlet.
De esta forma, Silbon ha logrado la expectativa de los diez millones de euros netos marcada por la firma cordobesa cuando el pasado 14 de marzo se decretaba el Estado de Alarma y tan solo ha obtenido un nueve por ciento menos de ventas brutas con respecto a 2019, según informa la compañía a través de una nota de prensa.
Con estos números, Silbon vuelve a tener un resultado bruto de explotación positivo en 2020 y se posiciona como una de las compañías españolas del sector premium de la moda masculina menos afectada por la crisis del Covid.
Durante los primeros meses de pandemia con las tiendas cerradas, el comercio electrónico se convirtió en el único canal posible para vender y la vía operativa esencial de Silbon para dar salida al stock que se había quedado congelado en los establecimientos físicos.
“A pesar de las dificultades impuestas por la pandemia que incluían Ertes y cierre de tiendas físicas, nuestro plan estratégico de 2020 ha funcionado a la perfección y nos ha permitido sortear los problemas generados por el Covid-19 posicionándonos, a día de hoy, como una empresa más fuerte y consolidada que hace un año”, ha indicado el CEO y cofundador de Silbon, Pablo López.
La tendencia ascendente de la tienda on line se mantuvo durante los dos últimos trimestres del año disparándose las ventas. Así, la firma cordobesa veía como antes del estallido de la pandemia el ecommerce representaba ya un 27% de la facturación hasta alcanzar a cierre de ejercicio el 38% del total.
Además del comercio electrónico, la estrategia global ha sido afianzada con la apertura, a partir del mes de junio, de seis nuevos puntos de venta físicos donde se destacan la subida de persiana en Barcelona y Madrid junto al desafío de aperturas outles en Córdoba, Málaga y en la capital de España, “unas tiendas que están dando unos resultados formidables para la compañía”, ha dicho López.
“La apuesta por nuestro ecommerce ha supuesto una de las piedras angulares de nuestro modelo de crecimiento económico, igualmente basado en la potenciación de servicios logísticos y transporte así como la apuesta por multiformatos de tiendas físicas, diversificando en tecnológicas y outlets”, ha destacado el CEO de la firma.
Según ha explicado López, durante la pandemia en Silbon “lejos de amedrentarnos y ser conservadores, se ha puesto toda la carne en el asador”. Para ello, la firma de moda masculina redimensionaba su situación afianzando la estrategia omnicanal, en la que se basa desde sus orígenes en 2010.
“Durante este año hemos tenido que consolidar equipos más que nunca y reinventar un modelo de negocio que, gracias a la fidelidad de los clientes Silbon, nos ha permitido mantener un nivel de ventas elevado”.
Asimismo y durante 2020, el grupo cordobés también ha continuado diversificando con el lanzamiento de una línea running y participando durante la pandemia desde la Responsabilidad Social Corporativa con la Fundación Vicente Ferrer en la construcción de una aldea en la India, ya terminada, y desde la Fundación Pequeño Deseo con los niños hospitalizados de larga duración.
A nivel nacional Silbon termina 2020 con 25 puntos de venta; 13 tiendas propias, tres outlets, dos franquicias y siete corners en El Corte Inglés además de la plataforma de ecommerce propia del grupo.
Para 2021 la compañía tiene propósitos de seguir consolidándose en Andalucía, llegando a las capitales en las que todavía no tiene presencia física, sumar alguna capital castellana y continuar creciendo en Madrid. En el marco internacional, la diversificación podría darse, con Portugal a la cabeza y no se descarta una posible vuelta a París cuando la situación sanitaria a nivel mundial sea propicia.
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