El Parlamento aprueba que se analicen los restos de posibles víctimas de la Guerra Civil en Ategua

El Parlamento de Andalucía quiere que se analicen los restos humanos hallados en el yacimiento de Ategua en excavaciones de los años 80 del pasado siglo y que pueden pertenecer represaliados de la Guerra Civil.

La Comisión de Presidencia, Administración Local y Memoria Democrática del Parlamento ha aprobado una Proposición no de Ley presentada por Podemos sobre “la aparición de posibles restos humanos relacionados con la represión franquista” en Ategua y ha instado al Gobierno de la Junta de Andalucía “a tomar las medidas necesarias” para arrojar luz sobre los restos, según se ha publicado en el Boletín Oficial del Parlamento de Andalucía (BOPA).

Así, se ha propuesto que se proceda al análisis por forenses de los restos humanos aparecidos en las excavaciones de Ategua y que actualmente se encuentran en el Museo Arqueológico de Córdoba y, en el caso de tratarse de víctimas a las que sea de aplicación la Ley de Memoria Histórica y Democrática de Andalucía, se pongan los hechos en conocimiento de la autoridad judicial. Se pide, asimismo, que se proceda a su identificación genética y al cotejo de su ADN con el de los familiares.

El Parlamento quiere, además, que las futuras excavaciones arqueológicas que vayan a realizarse en el yacimiento de Ategua se efectúen con la máxima atención a la más que probable aparición de nuevos restos humanos, posiblemente relacionados con la Guerra Civil española o la represión franquista.

Y, que en caso de que los análisis forenses y las futuras excavaciones arqueológicas en Ategua arrojaran resultados relevantes en el marco de la Ley de Memoria Histórica y Democrática de Andalucía, se proceda a una adecuada campaña de difusión que permita que los familiares interesados puedan recuperar los restos y darles sepultura conforme a sus deseos.

Informe arqueológico

Cabe recordar que un informe arqueológico detalla la aparición de al menos cinco cuerpos en Ategua que no responden a un enterramiento habitual y pedía a Memoria Democrática que certifique sin son represaliados de la Guerra Civil.

Los restos, en su momento, no se relacionaron más que con el yacimiento, pero de unos meses a esta parte, los informes que entonces se hicieron y una relectura de los mismos por una arqueóloga de la Junta, han puesto el foco en el origen real de esos restos humanos y abren la puerta a investigar si son restos de represaliados de la Guerra Civil.

La arqueóloga que ha tirado de ese hilo ha releído toda la información que existía sobre aquellos hallazgos de los años 80 y ha elaborado un informe para que Cultura y la Dirección General de Memoria Democrática tomen cartas en el asunto y que se pase del mero estudio arqueológico al forense para determinar el origen concreto de estos restos humanos.

Los detalles sobre las excavaciones llevadas a cabo entre 1980 y 1983 se escribieron en los cuadernos de campo de entonces de los arqueólogos que participaron en aquella tarea. Ahora, esta arqueóloga ha ido estudiando cada uno de ellos para saber qué significaba cada anotación sobre aquellos restos. En ese estudio, se empezó a reflejar la existencia de varios cadáveres –en concreto, de un mínimo de cinco cuerpos- y entre el millar de fotografías de la excavación, se encuentran también fotos de esos cadáveres. Los restos se encuentran desde entonces en el Museo Arqueológico de Córdoba.