¡Andaluces, entrad! ¡ la puerta está abierta¡

Este puente de Andalucía nos ha servido para varias cosas, la primera es darnos cuenta de lo genial músico que era Paco de Lucía (saberlo lo sabíamos, pero no nos habíamos dado cuenta), la segunda, comprobar que Estrella Morente estaría perfecta en Juego de Tronos, y la tercera es que a veces te regalan cada cosa que es como para ponerla en ebay al día siguiente. Y es que este fin de semana el Diario Córdoba, en colaboración con la Universidad Loyola, la Diputación y la Caja Rural, le ha regalado a Andalucía por su cumpleaños un tochaco de esos que te pones a leer en la sala de espera del dentista y estás deseando que te llamen. Se trata del Anuario Económico de Córdoba 2013, en el que lo primero que uno descubre es que la economía ignaciana es calcaíta a la otra, lo cual tiene dos posibles explicaciones: o economía no hay más que una y a ti te encontré en la calle; o hay muchas, pero hay una variedad pit-bull terrier que no suelta el bocado y que tiene a las demás acojonadas.

Pues bien, el Anuario, (todo color, papel satinado, versión before crisis - a partir de ahora bc-) es una sucesión de artículos que se parecen muchísimo entre sí, y que incide en lo que ya sabemos, éxito del rescate bancario, reforma laboral aún insuficiente, necesidad de agilidad, flexibilizad y otras perversiones. Recuerdo un chascarrillo que contó Enrique Morente en su última actuación en la Axerquía. Le dice el flamenco al señorito a las cuatro de la mañana tras horas de cante “qué buen ratito hemos echado…¡”, y le contesta el señorito “y el que nos queda amigo, y el que nos queda…”. Pues eso es lo que viene a decirle el Anuario a Andalucía, que feliz cumpleaños, y que el buen ratito de los últimos cuatro años no es nada para lo que nos queda. El próximo año, cuando se aproxime esta fecha, no os esforcéis tanto, os pasáis por un chino y con una careta a la que se le encienda la nariz vale, si lo importante es el detalle.

De todos modos, siempre hay alguna rendija, un espacio para lo imprevisto. Entre tablas, indicadores y esas cosas (me quedo con el directorio de cuarenta y nueve empresarios y una empresaria), se cuela probablemente sin intención una reflexión orteguiana sobre Andalucía, y es que la ciencia política aún no ha conseguido la perfección varietal del pitbull, aunque está en ello. Joan Font, director del IESA, escribe un artículo denominado “Respuestas sociales frente a la crisis” en el que entre otras cosas dice que “las protestas locales tienden más al perol que a la barricada. En otras ciudades imponen las casas okupadas, pero nuestro Rey Heredia es tan tranquilo como un jardín de una casa del Brillante”.

En una situación muy dura, de paro y escasez, con la presión de la justicia, unos cuantos vecinos y vecinas han creado en una vieja escuela un pequeño espacio hermoso, apacible, y  a la vez reivindicativo y firme. Quizás si algo nos define es esa vocación por el equilibrio, la belleza, la amabilidad ¿Hay algo más andaluz que entrar porque la puerta estaba abierta, que te corten la luz y el agua, te manden a la policía y un juez? Y eso no es todo, tras imputar a varios vecinos,  están dispuestos a incumplir la convención de Ginebra y enviar un arquitecto de esos a los que les gustan las plazas duras, y eso si que no hay movimiento social que lo supere. El pasado 15 de febrero estuve allí en un encuentro sobre espacios en desuso (participaban Axerquía 15M, Asociación Regina Magdalena, Colaborativa, Asociación Al Raso y Forum de Políticas Feministas) en un ejemplo de nuevas formas de participación, con alto componente tecnológico y elaboración teórica, y éramos no menos de sesenta los que compartimos la reflexión. Estas cosas andan haciendo en Rey Heredia para conseguir que la gente pueda imaginar un futuro distinto al que nos cuentan los miles de economistas disciplinados que pueblan nuestras instituciones. Mirad las cosas que hacen que al fondo hay sitio, y a ver si el próximo 28f lo podemos celebrar allí.

Nota: en la imagen, remake de la portada del disco Sgt Peppers Lonely Hearts Club Band, realizado años después por su autor, Peter Blake